Esta semana buscábamos una ruta próxima a casa que nos permitiera volver a comer. Siete Aguas era un lugar ideal para ello. Nos acercaríamos al pico de Santa María, un vértice geodésico de 1138 msnm, aunque se encuentre, por poco, en el término municipal de Chiva, siendo su máxima altura. Aprovecharíamos para acercarnos al abrigo que guarda unas pinturas rupestres neolíticas que se encuadran dentro de las llamadas pinturas rupestres de arte levantino en el barranco de las Colochas, también curiosamente en término de Gestalgar.
Tras mirar varias posibilidades nos decantamos por un track de Juane Alemany que seguimos prácticamente en su totalidad salvo un corto tramo en el que bordeamos una loma por la izquierda en lugar de hacerlo por encima de ella.
Cuando visitas sierras como la de Santa María, nos acude una reflexión que nos lleva a clasificar las sierras, al menos, en dos grandes grupos. Un grupo sería el de las sierras populosas y concurridas, con bullicio, con senderistas recorriéndolas habitualmente...; mientras otro grupo estaría integrado por esas sierras silenciosas, solitarias, escasamente visitadas, tranquilas...En el primer grupo podríamos incluir sierras muy conocidas como Espadán o la Calderona, entre otras. En este segundo grupo incluiríamos sierras menores como esta de Santa María, o la sierra de Chiva, por poner dos ejemplos. En ambos casos, disfrutamos cien por cien de ellas, pero en las del segundo grupo, nuestras sensaciones son diferentes. Pensamos en una soledad casi siempre inmerecida, en un olvido injusto a todas luces. ¿Por qué son menos visitadas estas sierras "menores"? No sé la respuesta. Solo sé que todas tienen alguna particularidad que las hace singulares y todas tienen motivos más que suficientes para ser visitadas y conocidas. Este es el caso de la sierra que hemos visitado. A pesar de su sencillez, hemos encontrado alicientes más que sobrados para mostrarla y hablar de sus cualidades para que sea más visitada. A las excepcionales vistas que se disfrutan desde el pico de Santa María, hemos de valorar su silencio, la serenidad que se respira, su soledad... Un sentimiento de simpatía te surge ante sierras sencillas y poco ostentosas como ésta.
Tras el reconfortante café, nos dirigimos hacia el paraje de la fuente de la Vallesa. Para ello, cogemos la carretera que parte junto al cuartel de la Guardia Civil y que por una estrecha y serpenteante carretera (el camino de Gestalgar) nos llevará hasta la fuente.
Hicimos allí una bonita ruta hace un tiempo:
Pico Cinco Pinos.
El Burgal, que tampoco hemos visitado, nos impide ver el Ropé.
Pico Cinco Pinos.
El Burgal, que tampoco hemos visitado, nos impide ver el Ropé.
Cuando nos giramos para descansar o ver el camino seguido hasta aquí, vemos emerger cual ballena en el océano, la afilada proa del pico Ropé, que también visitamos hace tiempo.
Pero seguimos parando y oteando el horizonte en busca de cimas conocidas:
El pico del Remedio, en término de Utiel.
El pico del Remedio, en término de Utiel.
Vértice geodésico de Santa María (1138 msnm).
Como comenté en la presentación, el vértice se encuentra en el término municipal de Chiva, siendo la mayor altura del mismo.Foto en el vértice.
El último puntal lo bordearemos por la izquierda en el tramo más confuso de toda la ruta en el que no hay sendero ni camino definido, por lo que caminaremos campo a través por terreno de monte bajo, por lo que no nos será especialmente difícil avanzar hasta que encontremos de nuevo el camino que nos devolverá al inicio de la ruta.
Un buen trago en la fuente aplacará nuestra sed.
Una bonita y solitaria ruta hemos terminado en este bonito paraje. Nos vamos con muy buenas sensaciones y con ganas de repetir rutas por estas sierras más tranquilas y menos concurridas que otras.
Empezamos el día en Siete Aguas con un café.
Ahora tocaba despedir la mañana con una cervecita, que el calor apretaba de lo lindo.
Y a casa, con renovados ánimos y con otro objetivo cumplido.
La ruta en el mapa.
Una bonita y solitaria ruta hemos terminado en este bonito paraje. Nos vamos con muy buenas sensaciones y con ganas de repetir rutas por estas sierras más tranquilas y menos concurridas que otras.
Empezamos el día en Siete Aguas con un café.
Ahora tocaba despedir la mañana con una cervecita, que el calor apretaba de lo lindo.
Y a casa, con renovados ánimos y con otro objetivo cumplido.
La ruta en el mapa.
La ruta en Wikiloc.
Hola Emilio. Muy buena reflexión sobre la masificación de unas sierras y la poca afluencia que tienen otras. Coincido completamente contigo en que cada sierra tiene su particular característica, por pequeña que sea, que la hace diferente de las demás. En este caso de la Sierra de Santa María es la riqueza geológica, y ese ambiente tan alpino de la zona alta, más esas pinturas lo que la hace especial, y que te hace regresar a casa, a mi mi pasó igual, con unas grandísimas, y solitarias, sensaciones. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Hola, Dani! Efectivamente, cada sierra tiene su idiosincrasia y ésta tiene una muy especial. La disfrutamos bastante y nos satisfizo el hecho de recorrer un terreno muy poco pisado y desconocido para nosotros. Todo un descubrimiento.
EliminarUn abrazo.
Hola Emilio
ResponderEliminarBuenos recuerdos de esta sierra y como nos muestras en ese recital de fotos, exageradas vistas por todas partes, por esa parte también tenemos mucho para "patear".
Que bien sienta esa cervecita del final de ruta y que cierto es eso de volver con los ánimos renovados y además con las pilas cargadas para la próxima semana.
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
¡Hola, Jose! Como le decía a Dani, un buen descubrimiento y mucho por explorar por la zona. Esa es la conclusión que sacamos al final de la ruta, además de llevarnos un excelente sabor de boca porque lo cierto es que disfrutamos mucho del paisaje.
EliminarUn abrazo.
¡Hola Emilio!
ResponderEliminarTal y como dices, cada sierra tiene su encanto y sus particularidades.
Yo prefiero estas sierras más solitarias que te permiten estar más en sintonía con el entorno gracias a la tranquilidad que se respira.
Que grande esa cerveza de final de ruta, vosotros si que sabéis como acabar bien una ruta!!!
Un abrazo.
Hola, David! Ciertamente la soledad de algunas sierras nos atrae y nos gusta recorrer y caminar por senderos y caminos poco transitados que nos permitan una mayor tranquilidad.
EliminarUn abrazo.
Hola Emilio...
ResponderEliminarUna gran ruta en una sierra,de las poco transitadas,como apuntas.
Gracias por seguir mi track...jejeje.En su día,cuando la hicimos,trate de hacerla lo mas circular posible,sobre todo en esa parte inicial,ya que había visto que tenia un largo tramo lineal.Acertada fue esa búsqueda y por supuesto la ruta te deja buenísimas sensaciones.Toda esa senda que te aproxima al barranco de las Colochas,es magnifica,con muy buenas vistas.El abrigo de las pinturas,le da ese encanto ''histórico'' a la ruta y desde luego,tanto la subida hasta el Santa Maria,como la bajada hasta enlazar con la pista,le dan un grandísimo atractivo,con estupendas vistas,aunque hay que evitar los días de mucho calor,sin duda es una ruta muy recomendable y cerca de casa.
Un abrazo.
¡Hola, Juane! Al tener un desconocimiento casi total de la sierra era preciso adentrarse con un track de confianza y cómo no, el tuyo lo es desde luego. Disfrutamos de la soledad de esta sierra y de la belleza de sus paisajes. Gracias.
EliminarUn abrazo.
Hola Emilio,
ResponderEliminarAyer sábado pude realizar esta ruta con Jaume y Rafa-La ayudándonos de tu track que nos sirvió de buena referencia. Efectivamente tu descripción detallada como nos tienes acostumbrado nos fué de gran ayuda. Lástima que la bruma estival nos impidiera visualizar nítidamente algunos paisajes a lo lejos que con tu cámara supiste captar. Pero en fín, es lo que tiene hacer una ruta en verano o en invierno. El calor fué insoportable y nos dejó algo perjudicados, en mi caso, "acabado"; 44 grados al recoger el coche que estaba en la sombra esperando nuestro regreso dá fé del calor que nos hizo. Te echamos mucho de menor y desde aquí te enviamos un abrazo. Pues eso, ahí va.
¡Hola, Emilio! Ya sabes que me hubiera encantado acompañaros, pero mi estado físico bastante perjudicado me lo impidió. Una pena que la bruma os impidiera disfrutar del paisaje y también como evidencias, no es una ruta muy adecuada para el verano porque los tramos de sombra son casi nulos. Bueno, me imagino que seguro que algo de positivo habéis sacado de lo hecho esta mañana.
EliminarUn abrazo.