Esta semana tocaba ir hacia el sur. Por iniciativa de mi amigo Ricardo Vivó y siguiendo un track de "Catadores de Altura" decidimos visitar Bocairent (680 mnnm) y realizar la ruta que encabeza el título de esta entrada. Es una ruta de unos 14 km y entre 4 y 4,30 horas de recorrido. Es una ruta bastante árida. El incendio de 2010 ha dejado un paisaje bastante desolador en lo que a vegetación se refiere. Por ello no es conveniente realizarla en verano o en días de calor.
Los cinco atacan de nuevo (de izq. a dr.):Ricardo Vivó, Jaime Ballester,Luís Miquel, Emilio Romero y servidor en la Plaza del Ayuntamiento, inicio de nuestra ruta de hoy.
La ruta comienza desde la Plaza del Ayuntamiento siguiendo la indicación de la ermita del Sto. Cristo que nos conduce en descenso hacia el bonito puente del mismo nombre y que nos llevará en fuerte zigzag y siguiendo el calvario hasta la ermita del Santo Cristo del S. XVI (730 msnm) con bellas perspectivas del pueblo y del valle.
Ermita del Sto. Cristo, primer objetivo de nuestra ruta.
Bocairent a contraluz desde el puente del Sto. Cristo.
Vista del puente que cruzamos para ascender a la ermita.
Desde el puente también podemos ver enfrente "Les covetes dels moros".
Bocairent desde la subida a la ermita. Sobre la población destaca la torre de la Iglesia de la Asunción.
Un último esfuerzo y llegamos arriba.
Continuamos la ruta por detrás del ermitorio.
Buscamos un poste señalizador y encontramos una pista a la derecha que hemos de seguir un tramo, dejando el PR CV 306 que tiene aquí su inicio y fin.
Buscaremos este poste y continuaremos un tramo por un camino que sale a la derecha.
Junto al camino encontramos esta cruz conmemorativa de la muerte de 62 soldados en la guerra carlista en el año 1873.
Poco después encontramos una cueva, lugar de oración de la beata local Piedad de la Cruz. Hemos de buscar una senda que por la izquierda de la cueva nos conduce hacia un barranco que hemos de cruzar para después subir y alcanzar un collado desde el que es fácilmente reconocible la ciudad de Ontinyent.
Cueva de la beata Piedad de la Cruz.
Buscamos pues una senda a la izquierda y por encima de la cueva que asciende un poco y nos conduce enseguida a un barranco que hemos de cruzar y ascenderlo siguiendo unos hitos de piedra hasta que llegamos a un collado donde encontramos una pista que hemos de continuar durante más o menos 1 km.
Hemos de cruzar este barranco bastante árido y con restos de árboles calcinados por el incendio de 2010.
Esta pista que encontramos al subir el barranco hemos de seguirla durante más o menos 1 km.
Vista de Ontinyent en el fondo.
Hemos de estar atentos porque en un punto encontramos una senda que sale a la derecha y que no se encuentra marcada. Esta senda nos lleva a través de un barranco también árido, con paredes rocosas y que iremos descendiendo hasta llegar a los depósitos de agua de Ontinyent donde encontramos, a la derecha, la senda del barranco dels Tarongers que cogeremos a la vuelta una vez hayamos visitado el segundo objetivo de nuestra ruta: el Pou Clar.
Senda en descenso que nos lleva al inicio del barranco dels Tarongers.
Peladas paredes encajonan este barranco.
Bordeando la carretera vemos un anticipo de lo que nos espera en el Pou Clar.
Junto a la carretera encontramos un aparcamiento y paneles explicativos del Pou Clar. El Pou Clar es un paraje fluvial cuyas fuentes alimentan el río Clariano y que forma una serie de pozas que han esculpido la roca calcárea con formas redondeadas. Las distintas pozas tienen sus nombres, que de arriba a abajo son:“Pou dels Esclaus”, ”Pou Clar”, “Pou Gelat”, “Pou de la Reixa”, “Pou Fosc” y “Pou dels Cavalls”. Es un enclave espectacular en el que vale la pena entretenerse un buen rato y en el que nosotros aprovechamos para almorzar.
Una de las preciosas formas de este paraje singular.
El merecido almuerzo y la foto para inmortalizar el momento.
El Pou es fácilmente accesible y se puede recorrer por un camino preparado para ello.
Las aguas de las pozas ,curiosamente, presentaban distintas tonalidades. En esta domina el verde esmeralda .
Vista de las primeras pozas que encontramos al bajar las escaleras que llevan a este paraje.
Después de recrearnos y descansar en este enclave privilegiado, retornamos sobre nuestros pasos para regresar a Bocairent,esta vez, por el barranco dels Tarongers, nuestro tercer y último objetivo. a lo largo de él encontraremos la corriente de agua del Clariano, que nos acompañará durante un buen tramo, con vegetación de ribera aún sin hojas y arbustos típicos de barrancos como adelfas, brezo, romero, lentisco...y desgraciadamente vegetación quemada en el ya citado incendio de 2010.
A poco de empezar el sendero PR V 122 encontramos esta fuente de fresca agua en la que rellenamos las botellas.
A lo largo del recorrido encontraremos varios molinos (Molino de Patirás, molino de Lluna...)en ruinas que aprovecharon durante el pasado siglo, las aguas que recorren este barranco, con distintos usos según la época y las distintas necesidades del momento. Aunque los molinos empezaron utilizando una tecnología preindustrial, algunos se adaptaron a nuevas funciones y dieron lugar a fábricas harineras, papeleras, textiles, hidráulicas, etc
Molino de Patirás. Justo antes de llegar a él encontramos la senda que se adentra en el barranco.
Hemos de vadear el barranco en varias ocasiones. Este es uno de esos puntos.
La senda deja a la izquierda dos desvíos sucesivos que llevan al alto de Castellar y que no debemos coger en esta ocasión.
Encontramos varios azudes en el cauce del barranco, como éste de la foto, que abastecían de agua a los diferentes molinos.
Molino de Lluna, en la puerta figuraba al año 1902.
En algún tramo veíamos bonitos rincones con agua, como el de la foto.
Seguramente estas ruinas pertenecen a la casa de Beneyto.
A partir de la casa de Beneyto, la senda asciende por la ladera de la montaña desde la que podemos observar el barranco al fondo.
Vista panorámica del barranco.
La senda ascendiendo y ya en el fondo, la casa de Beneyto.
En algún tramo del ascenso podemos observar la ermita del Santo Cristo en su parte este.
La senda en ascenso nos lleva al camino íbero, caracterizado por estar excavado en la roca en mucho de sus tramos, incluso escalones. Esta foto corresponde a uno de esos tramos.
Vista del barranco que dejamos atrás.
Este último tramo antes de Bocairent es un un ascenso más o menos fuerte, hasta llegar a lo alto de un collado en el que ya empezamos a bajar y vemos Bocairent ante nuestros ojos.En el tramo de bajada encontramos escalones esculpidos en la misma roca. Y llegamos a este poste indicador continuando en dirección a Bocairent, a donde entraremos por el puente de Darrere la Vila, el más antiguo de Bocairent.
Poste indicador ya en las proximidades de Bocairent.
Un precioso campo de perales en flor nos recibe a la entrada.
Y de nuevo vemos el perfil de la ermita, nuestro primer objetivo del día.
Crucero a la entrada de Bocairent.
Los cinco magníficos a las puertas de Bocairent.
Típica imagen de Bocairent entrando por el puente de Darrere la Vila.
Fuente de En Ferris.
Antiguo lavadero restaurado.
Entramos a Bocairent por su puente más antiguo y callejeamos un poco, lo que da lugar a encontrar bellos rincones en esta población cuyas casas se apiñan en torno a un cerro, apretadas unas con otras, como con miedo a quedarse sin sitio. A continuación una pequeña muestra de distintos rincones del pueblo.
Y para terminar la jornada, cómo no, comimos y bebimos lo que pudimos.
Se aprecia en la foto la cara de sufrimiento.
En resumen, ruta interesante por las vistas, el Pou Clar y la población de Bocairent, pero que adolece de falta de vegetación y bosque que la haga más llevadera, por lo que no se aconseja su realización en los meses calurosos.
¡Hola Emilio!
ResponderEliminarAunque sea una ruta árida, tiene mucho encanto por el paisaje y por la arquitectura rural que la acompaña. Las pozas de agua clara, son un buen regalo que dan sensación de frescura.
Un abrazo.
Hola Emilio, una ruta de senderismo muy completa, ya que no solo se anda que tambien, (esa subidita a al ermita) sino que en cada rincón por le que pasa hay una historia detrás, con lo que es mas enriquecedora.
ResponderEliminarEn el enlace que pone película, salen las fotos también igual que en el enlace de Todas las fotos.
Un abrazo
Hola Emilio
ResponderEliminarBueno pues está bien, el problema es lo que tu dices de la falta de vegetación, pero todo no puede ser...
Lo que me sabe mal, que es cierto que se aprecia la cara de sufrimiento en la foto del restaurante...Como os lo montáis.
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
HOLA QUERIDO EMILIO, LOS CINCO DE NUEVO. ESTO ESTÁ CREANDO EN MÍ UN HÁBITO TAN AGRADABLE Y NECESARIO, QUE EL DÍA QUE ME FALTE DE SEGURO QUE ME ENTRARÁ "MONO".
ResponderEliminarCOMO DICE FERNANDO J., AUNQUE LA RUTA REALMENTE ES ÁRIDA Y DESANGELADA POR CULPA DEL INCENDIO DEL 2010, NO DEJA DE TENER UN ENCANTO ESPECIAL POR LA PANORÁMICA QUE SE APRECIA DESDE LA ERMITA DEL SANTO CRISTO, POR EL PARAJE DEL POU CLAR, POR LA IMPACTANTE ENTRADA A BOCAIRENT POR EL PUENTE VIEJO, Y, POR SUPUESTO, LO MÁS IMPORTANTE Y LO QUE LE LLEGA A DAR LA PUNTUACIÓN MÁS ALTA A LA RUTA, LA BUENA Y GRATA COMPAÑÍA.
UN ABRAZO, Y HASTA EL SÁBADO. Ricardo Vivó.
Hola Emilio! Una bonita ruta, aunque es una lástima el estado en que la dejaron. Nosotros, hace dos años, la encontramos muy mal.., recien quemada, una pena.
ResponderEliminarSobre el Pou Clar, te diré, es una locura la cantidad de gente que lo visita en los días siguientes a grandes lluvias. Todo un acontecimiento, este rincón tan precioso.
Un abrazo!
Vicente
Muy chula la ruta,Emilio,me ha gustado especialmente la zona del barranco y muy interesantes y curiosos los azudes y los molinos,como ha dicho Abi,una ruta para empaparse uno de historia y con buenas vistas de Bocairent desde las alturas,como te gustan a ti jejeje.
ResponderEliminarUna verdadera lástima lo de ese incendio.
Un abrazo.
¡Hola Fernando! Como yo siempre digo, no hay ruta mala. Cada ruta tiene su aquel. Estar al aire libre es ya de por sí un valor. Si además recorres lugares con historia, aún más. El Pou Clar es un lugar a visitar.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Hola Abi! Sí, la verdad es que a pesar de la aridez, la ruta tiene sus valores y merece la pena, aunque con fresquito mejor. Gracias por avisarme del problema con el enlace. Gracias a ti ya lo he solucionado.
Un abrazo.
¡Hola Jose! Acostumbrados a sierras más verdes, esta se nos hizo un poco árida, pero supimos encontrarle el encanto. Disfrutamos mucho, como siempre. Lo peor de todo, el final. Tener que quedarse a comer en el restaurante fue un suplicio, ja,ja,ja...
Un abrazo.
¡Hola Ricardo! Por supuesto que la ruta merecio la pena. Tenía ingredientes para que así fuera y sobre todo el compañerismo y la amistad de los componentes que mejora cualquier ruta por mala que pudiera ser. Nos vemos el sábado.
Un abrazo.
¡Hola Andamontes! Si estuvisteis por allí ya conoces lo empobrecida que quedó la zona debido al incendio. El monte bajo y arbustos ya han crecido algo. En el barranco también hay algo más de vegetación debido al agua, pero la verdad es que aún tardará bastante en repoblarse la zona.En cuanto al Pou Clar, no quiero ni pensar cómo estará en verano. Ese mismo día había un grupo de unos diez jóvenes bañándose en sus pozas y aún no era ni primavera.
Un abrazo.
¡Hola Dani! Es curioso ver cómo el hombre ha aprendido a aprovechar todos los recursos a su disposición para obtener lo que necesitaba. Así es posible ver como a lo largo de todo el cauce del río se encuentran molinos para ir aprovechahdo sus aguas al máximo. Lo de los incendios una pena y un crimen contra nuestro patrimonio natural.
Un abrazo.
Lástima que los atroces incendios hayan mermado este rincón tan bonito de nuestra tierra, como bien apuntas, evitar en días de calor, aunque siempre tenemos el Pou Clar para darnos un buen remojón jeje. Magnífico reportaje nos has mostrado Emilio, como viene siendo costumbre.
ResponderEliminarUn abrazo