Seguidores

lunes, 1 de enero de 2018

PICO DEL AVE, DOS AGUAS (30/12/2017).


No hay mejor forma de terminar un año que ir a la montaña a airearte un poco y salir del ambiente que rodea estas fechas tan marcadamente consumista y artificial. Hemos aprovechado pues para realizar una ruta en mente desde hacía mucho tiempo pero que los terribles incendios que desgraciadamente nos asolan año tras año nos hicieron desistir de realizar allá por el 2012. 



Se trata de la ascensión al Pico del Ave, cima emblemática de la Hoya de Buñol, por un paisaje desolado como consecuencia de los incendios pero que nos llevará a disfrutar de excepcionales vistas en 360º , si el tiempo es adecuado, desde su cima que compensarán sobremanera la desolación y parca vegetación del recorrido realizado. Hoy retomamos este proyecto después de que allá por el mes de abril nuestro amigo Dani Alcalá (Per dalt i per baix) y más recientemente  nuestros amigos de Trotasendes Benicalap, nos lo trajeran de nuevo al candelero. Visto que por sus características (nula sombra en todo el recorrido) las épocas de calor no son recomendables para sus realización, nada mejor que este recién estrenado invierno para acercarnos hasta esta sierra que aún no habíamos tocado. 


 Llegamos hasta Dos Aguas (Hoya de Buñol) por la CV- 435 después de pasar por Buñol y Macastre. Apenas entrado al pueblo, a nuestra izquierda, encontramos la Fuente Nueva.  Aparcamos aquí. Ésta es la imagen matutina que muestra Dos Aguas a esta pronta hora del día.


La Fuente Nueva (Dos Aguas).


Aquí encontramos también un panel informativo con un par de rutas que se pueden realizar en la localidad. Ninguna de ellas coincide con la que vamos a realizar. Así pues, nos tocará volver para hacer alguna de ellas.



De izquierda a derecha, Rafa, servidor y Emilio Romero.


 Iniciamos aquí nuestro recorrido por esta empinada calle junto a la fuente.


Enfilamos la calle y vemos un poste direccional (el único de toda la ruta) que nos marca "Antiguo camino a Macastre o Camí de La Garita".


 El  camino está cementado en su primer tramo.


Apenas hemos caminado uno metros y ya disfrutamos de esta bonita vista del pueblo, con el Alto del Madroñal detrás.


 Y de frente, el estrecho canal por el que transcurre este camino a Macastre.


 Subimos por la derecha.


 Y de nuevo por la derecha. 
Este camino termina en una casa particular...


 ...y empezaremos a ascender por la senda que sale a la izquierda.


 De nuevo, sin dejar de subir, nos volvemos para disfrutar de esta vista de Dos Aguas.


En este primer tramo tenemos una buena pendiente. Por suerte, el sendero es un clásico camino de herradura muy bien trazado con una sucesión de eses que suaviza bastante la pendiente haciendo el camino más llevadero.


 El sendero es muy estético. En el punto más estrecho del mismo, entre estas dos grandes peñas calizas, ofrece esta vistosa panorámica del pueblo.


Evidencia de que pisamos un sendero de herradura es el hecho de que es posible encontrar, en bastantes tramos, el empedrado original, como muestra la fotografía.


Esta instantánea muestra lo vertical del sendero que en apenas un kilómetro ha salvado doscientos metros de desnivel.


La canal por la que hemos subido se ensancha dando lugar a una planicie poblada de monte bajo (romero, tomillo, brezo, jara blanca, coscoja...) por la que transcurriremos unos centenares de metros por un sendero con hitos aunque bastante evidente, que nos lleva hasta un poste de alta tensión que vemos de frente.


En esta planicie también se nos hace evidente la presencia del protagonista de la ruta si miramos al este: el pico del Ave.


Ampliamos con zoom la cima para ver mejor lo que nos vamos a encontrar luego: un vértice geodésico, una caseta forestal y unas antenas de telefonía, características todas ellas comunes a muchas otras cimas que hemos ido ascendiendo.


De vez en cuando también nos detenemos para mirar hacia el sur y disfrutar de la altura que hemos adquirido.


Frente a nosotros una loma a la que deberemos dirigirnos.



Nuestro camino irá progresando paulatinamente hacia el este, nuestra derecha.


Avanzamos, pero también nos detenemos una y otra vez a pesar del fuerte viento que cada vez azota con más fuerza para disfrutar de las vistas.


Ese poste es el siguiente referente ya que pasaremos bajo su base.


Pero antes, llegamos a este punto donde el sendero se bifurca. El tramo que hemos hecho hasta aquí lo repetiremos a la vuelta. Ahora nos iremos a la izquierda para subir al pico y volveremos luego por el otro ramal para terminar la ruta.


Apenas unos metros después de girar a la izquierda, ¡atención!, dejamos el camino de Macastre y nos desviamos a la derecha para pasar junto al poste de alta tensión. 


Vale la pena disfrutar del paisaje.


Aunque parece cercano, aún nos queda un trecho por recorrer.


Aunque vemos algunos puntos azules muy desdibujados y hemos tenido hasta aquí un camino marcado con hitos, a partir de aquí nos va a ser más difícil encontrarlos, por lo que hemos de ir avanzando siguiendo la referencia del pico hacia el este. Creo que algunos hitos pueden haber caído como consecuencia, por ejemplo, de fuerte viento como sucede hoy, u otros motivos. El caso es que este tramo es algo más difícil de seguir ya que no vemos un sendero evidente.


Pasamos junto a la torre. Referencia clara.


Seguimos avanzando a media ladera siempre en dirección este, pasando por debajo de estos riscos.


Vamos bordeando esta loma.


Siempre el pico frente a nuestro avance.





Otra referencia que tomaremos después es un solitario pino quemado. 
Pasaremos junto a él por lo que caminamos en su dirección.



Aquí lo tenéis. Tal vez si nos hubiéramos acercado más a él hubiéramos encontrado mejor camino.



Ahora nos dirigiremos hacia ese cordal que vemos frente a nosotros sin irnos a la derecha.


Aquí estamos en pleno esfuerzo buscando el mejor camino.



Llegamos al cordal y a nuestra izquierda vemos una cruz metálica.



Ahora ya vemos un sendero más evidente que va por encima del cordal.



Seguimos el sendero dirección hacia el pico. Nos encontramos con otra cruz metálica.



Desde el cordal tenemos ahora excepcionales vistas sobre la vertiente norte.
La Hoya de Buñol se disfruta en su totalidad. 
Buñol desde las alturas.


Turís desde el cordal.


Aprovechamos para hacer una panorámica en cada vertiente. Ésta es la cara norte.


Ésta es la vertiente sur.


Buñol, Alborache y Macastre, de más lejos a más cerca.



El sendero avanzará ahora por la vertiente norte del pico, en la zona de umbría.


Pasaremos antes por detrás de esta cresta rocosa, creo que la llaman el "peine".


Yátova a los pies del Motrotón.


Seguimos avanzando con la sierra de Martés como fondo.



Ahora entraremos de lleno en la umbría del pico.


Pero antes, un vistazo atrás para ver de donde venimos.


Avanzamos ahora por una estrecha senda por la cara norte, muy bonita y con buenas vistas.



Fácilmente reconocible, hacia el oeste, el embalse de Forata.


Este tramo de ruta es también el más montañero.


La senda es muy estrecha y transcurre pegada al borde.



Sobrepasamos la caseta forestal y nos ponemos casi debajo de las antenas siempre buscando el ascenso que nos será más cómodo.


Antes de iniciar el asalto final a la cima nos detenemos unos instantes en la fuente del Zurgacho.
Desgraciadamente, apenas una gota cae con lenta cadencia a la cubeta de la fuente. Esperemos que esta pertinaz sequía termine pronto.


A partir de la fuente, seguiremos un corto tramo por el sendero, que hasta ahora era bastante evidente, hasta que parece desaparecer.


En ese punto, haremos un giro hacia la derecha y hacia arriba intentando buscar una continuidad. No nos será fácil porque no hay una senda marcada como tal hasta la cima, pero si hay una trazada que si somos capaces de localizar nos facilitará la subida.


Rafa y Emilio Romero buscaron un camino más directo subiendo casi verticalmente por donde mejor pudieron.


Yo busqué una alternativa que me dejó en la base de la torre forestal y con una corta y sencilla trepada , accedí hasta el vértice geodésico. Creo que esta alternativa es más sencilla. La trepada no tenía dificultad pero las piedras estaban muy húmedas del rocío de la noche y ser zona de umbría por lo que tuve especial cuidado para no resbalar.


Ya en la cima, aún padeciendo un fuerte viento, disfrutamos del paisaje en 360º, aunque una persistente neblina nos impedía una visión nítida.
Embalse de Tous.


La cercana localidad de Millares, matizada por la neblina.


Y hacia el oeste, era fácilmente observable el depósito superior de la muela de Cortes.


Vértice geodésico del Ave (952 msnm).


No podía faltar la foto en el vértice.
Debido al fortísimo viento, desistimos de hacer una foto de grupo con el disparo automático de la cámara porque seguramente habría caído al suelo.


Vistas a la sierra de Martés.


El recinto de la caseta forestal. El edificio del garaje parece reciente.


Panorámica hacia la Hoya de Buñol desde la cima del Ave.


Recinto de las antenas.


Omnipresente Penyagolosa. No podía faltar en esta crónica. Es evidente que es el señor de nuestras montañas.


Vistas hacia el sur.
 Estas formaciones nos recuerdan un paisaje de dunas.


Tras el almuerzo en la cima, tomamos el camino de descenso. Un tramo de unos tres kilómetros de pista nos espera. Sin duda, el tramo más monótono de la ruta, aunque con algunos atractivos que la hacen más amena de lo que pudiera parecer.


En la bajada nos entretenemos en intentar captar con el zoom la cima del Mondúver y el Peñalva.
La imagen no es muy nítida.


Otro rincón espectacular es esta especie de circo rocoso que forma el pico en esta vertiente sur.


El descenso por la pista nos lleva hasta esta bifurcación. En ella abandonamos la pista, que sigue a la izquierda hacia las Casas del Collado, para seguir por la derecha por un tramo la Vereda Real de Castilla según el mapa del IGN.


Apenas tomado el desvío observamos un colmenar en la cercanía del camino. Precaución, sobre todo en épocas de más calor.


El sendero atraviesa tres pequeños barrancos.



Y tuvimos la suerte de ver estos soberbios ejemplares de cabra montés. Tuvieron difícil descubrirnos porque el viento soplaba en contra nuestra evitando que les llegaran nuestros efluvios.



La senda nos lleva de nuevo al enlace con el tramo de ida que hicimos horas antes.
Ahora sólo nos toca regresar por el mismo camino hasta Dos Aguas.


Lo bueno de bajar es que ahora disfrutamos de frente del paisaje que anteriormente llevábamos a la espalda.


Como siempre pasa, las bajadas, siendo más cómodas, son muy malas para las articulaciones. En este caso, dado el desnivel de la misma, nuestras rodillas lo notaron. 
De nuevo, a la vista, Dos Aguas.


Detalle de una de las numerosas eses que jalonan este bonito camino de herradura que no no importó repetir en la vuelta por su estética y practicidad.


Realizamos los últimos metros de esta entretenida ruta.


Últimos metros antes de desembocar de nuevo en el punto de inicio.


De nuevo, la Fuente Nueva, inicio y final de la última ruta del 2017.

En resumen, una entretenida ruta en forma de raqueta o como digo en wikiloc en forma de hoja lanceolada con peciolo que nos lleva hasta la cima del pico del Ave, donde disfrutaremos de excepcionales vistas que compensarán el desolado paisaje que nos lleva hasta allí. Recomiendo realizarla en sentido dextrógiro y en épocas donde el calor no apriete porque no hay ninguna sombra en todo el recorrido.


La ruta en el mapa.




La ruta en Wikiloc.


Powered by Wikiloc


Película de la ruta.




13 comentarios:

  1. ¡Hola Emilio!

    Primero de nada, feliz año.
    Muy buena forma de acabar el año, con una bonita ruta a una cima con unas vistas impresionantes.
    Esa canal me ha gustado mucho, las vistas sobre el pueblo son una pasada.
    Si ya con el mote bajo impresiona, si no se hubiera quemado todo, la ruta, bajo los árboles, habría sido una delicia.
    Ahora a esperar a ver con que rutas nos sorprendes con este 2018 que recién comienza.

    ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, David! Como suele pasar en un porcentaje grande de ocasiones, las vistas desde las cimas suelen compensar con creces los esfuerzos realizados o los caminos poco agradables paisajísticamente hablando. Este es el caso de la ascensión al Ave. Aunque el paisaje está totalmente desolado, vale la pena la ruta por las excepcionales vistas desde su cima.
      Te deseo también un Feliz y montañero 2018.
      Un abrazo.

      Eliminar
  2. Hola Emilio.

    A pesar de lo devastada que quedó la zona por el incendio, esta fue una ruta que nos gusto mucho, en especial el tramo crestoso cuando te enfilas hacia la cima y como no el camino de herradura que serpentea entre los gendarmes calizos, que es de esos tramo por los que no te importa pasar dos veces en una ruta. La única pega que le pongo es que no se pueda evitar ese largo tramo hormigonado de la primera parte del descenso. Aún así, una ruta que seguro que repetiremos en un futuro.

    Por cierto, el punto más elevado de la Hoya de Buñol es el Pico de Santa María ;-)

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, Dani! Disfrutamos mucho la ruta, a pesar de que el fortísimo viento y la neblina nos entorpeció algo las vistas. El tramo de la pista es más amorfo, pero tuvimos la suerte de ver las cabras que nos alivió un poco la monotonía de la vuelta. Gracias por la puntualización, no recuerdo donde lo leí y en esta ocasión no contraté la información. Ya está corregido.
      Feliz Año y un abrazo.

      Eliminar
  3. Hola Emilio!
    La Sierra del Ave,siempre me ha cautivado. Está muy cerca de Valencia y tiene una gran oferta montañera (incluida una ferrata y un barranco).
    La primera vez que subí al Pico del Ave, lo hice por casualidad (estuvimos esperando en la pista de entrada al Moluengo más de una hora a que dejara de llover y en vistas de que no paraba decidimos buscar otro pico alternativo y aparecimos en Dos Aguas). Desde entonces he estado varias veces en su cima, combinando distintos itinerarios (por el Camí de La Garita, por la ferrata y bajando después por el barranco, e incluso una vez por toda la pista).
    Como siempre un post muy acertado y muy bien detallado.
    Te deseo todo lo mejor para este 2018 que hemos estrenado, esperando nos sigas deleitando con nuevas rutas.
    Un gran abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, José Vicente! Ciertamente, el pico del Ave tiene un perfil tan particular que su visión te hipnotiza y deseas subir a él. Esa era la inquietud que teníamos desde hacía mucho tiempo y, por fin, pudimos llevar a cabo nuestro objetivo. Sale una bonita ruta con excepcionales vistas capaces de satisfacer al más exigente. Mis mismo deseos para ti y que el 2018 te traiga excelentes rutas.
      Un abrazo.

      Eliminar
  4. Hola Emilio...
    Desde luego que esa Sierra de Dos Aguas,merece mas atención por nuestra parte y ahí esta lo que comenta Jose Vicente.
    En un par de ocasiones he subido a ese '''Ave'' y ratifico lo que nos comentas en la crónica,de hacer en época de poco calor...jejeje
    Es una sierra que ofrece fantásticas vistas y sobre todo,esa subida inicial,que luego se baja,es una pasada...
    Las dos veces que he disfrutado de esta cima,he terminado en Venta Gaeta,con buen yantar...jejeje

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, Juane! Ruta estupenda con un inicio y final estupendo y unas excepcionales vistas desde su cima. Tu propuesta de final gastronómico es de lo más sugerente. Tal vez la próxima vez sea el punto y final de la ruta.
      Un abrazo.

      Eliminar
  5. Buenas noches, Emilio: La verdad es que pese al paisaje desolado por falta de arbolado, el esfuerzo merece la pena por los espectaculares paisajes que se pueden observar desde la cima. Era mi segunda ascensión al Pico; la anterior se remonta a unos 20 años antes, subiendo desde Llanorel. una buena marcha para culminar el año; lo pasamos espléndidamente los tres a pesar del fuerte viento que nos azotaba incesantemente. Ahora a preparar y disfrutar de las venideras en este año reciennacido 2018. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, Emilio! Disfrutamos de lo lindo con esta primera salida del año. Aunque como comentas la desolación de la zona debida a los incendios es grande, se compensa ampliamente con las vistas desde la cima. Ahora a disfrutar de otras rutas y cimas que nos esperan para este 2018
      Un abrazo.

      Eliminar
  6. Hola Emilio
    Una pena que debido a los incendios se encuentre todo así, pero por lo menos las vistas desde el Pico del Ave son buenas y bonitas.

    Inevitable e irresistible hacer esa foto del pueblo entre esos dos paredones inmensos.

    Ahh!! Nosotros también nos cruzamos con dos o tres cabras, pero fue visto y no visto corrían mas que nosotros jajaja.

    Un abrazo Y feliz año nuevo
    Jose
    TROTASENDES BENICALAP

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, Jose! Sí, el paisaje no acompaña demasiado, aunque todo paisaje tiene su encanto. De todos modos, las vistas desde esa privilegiada atalaya valen mucho la pena.
      Un abrazo.

      Eliminar
  7. saludos rafa de otro rafa que creo que trabajamos juntos en muebles estivalis en alcacer. yo ya esa ruta la ice aya por el año 1989 pero suviendo por el collado y vajando por donde tu empiezas a suvir.saludos.

    ResponderEliminar