Tras muchos meses en el dique seco debido a mis maltrechas rodillas, he querido probarlas con un sencillo test para ver cómo respondían. Evidentemente he elegido una ruta muy, muy sencilla y muy corta. Tanto es así que durante el corto recorrido tuvimos ocasión de cruzarnos con múltiples familias y grupos de familias con numerosos retoños que iban y venían disfrutando del recorrido. Se trata de la subida al castillo de Benalí, una ruta clásica y familiar en el precioso municipio de Aín enclavado en pleno corazón de la sierra de Espadán.
Comenzamos nuestra ruta desde el aparcamiento que encontramos a la entrada de la población, donde seguro que encontramos un hueco para dejar el vehículo.
Dirigimos nuestros pasos hacia el pueblo y nos encontramos enseguida con el Ayuntamiento.
En este punto tuve un casual y agradable encuentro con Dani ("Per dalt i per baix") y sus dos canes que acaban una ruta y marchaban para casa. Departimos uno minutos y nos despedimos.
Yo continué la mía, que ahora os seguiré contando.
En este punto tuve un casual y agradable encuentro con Dani ("Per dalt i per baix") y sus dos canes que acaban una ruta y marchaban para casa. Departimos uno minutos y nos despedimos.
Yo continué la mía, que ahora os seguiré contando.
Buscamos la ermita del Cristo del calvario, pero en lugar de hacerlo por la calle del Calvario que es más recto, decidimos callejear por el pueblo para disfrutar de las tranquilas, limpias y estrechas callejuelas de la población.
Aín esconde bellos rincones que bien valen un paseo para conocerlos.
Tranquilas, limpias y silenciosas calles del casco urbano de Aín.
Vale la pena dar un paseo por este precioso pueblo de Espadán. Tal vez el más bonito de la sierra.
La pala verde nos indica "SLV 27 Al castillo 20min". Es la dirección que vamos a seguir.
Pero antes nos desviamos unos escasos metros para subir a la ermita del Cristo, enclavada en este bonito calvario a ambos lados de una hilera de cipreses.
Una de las estaciones del calvario.
Ermita del Cristo del Calvario (S. XVIII).
El Cristo a través de la celosía de la puerta de la ermita, aunque no se aprecia bien por la lámpara que lo tapa parcialmente.
El Benalí tras esta otra estación del calvario.
Aín desde la ermita del Cristo.
Retomamos el camino.
Enseguida nos toparemos con el barranco de la Caridad, por el que va a transcurrir esta primera parte de la ruta.
Llegamos hasta el Arquet, que forma parte de un acueducto que conduce agua para el regadío de la zona norte del barranco, según nos informa un panel explicativo.
Este es el panel que nos ilustra sobre esta construcción que forma parte del patrimonio cultural de esta población.
Pasamos el Arquet y nos encontramos el reconstruido Molino del Arc.
Seguimos nuestro camino acompañados por el dicharachero cauce del barranco.
Enseguida, frente a nosotros, la silueta del castillo nos indica hasta donde habremos de subir.
En los diferentes cruces que nos iremos encontrando, el poste metálico con el icono de "Parque Natural" nos irá marcando la dirección correcta. En este cruce concretamente, junto al nogal que vemos en la foto, se encuentra el desvío del GR 36 (que ha coincidido en este tramo con el SLV 27) hacia el collado de Barres . Nosotros seguiremos por la derecha, aunque a la vuelta nos desviaremos por aquí para no repetir el camino de ida.
Durante el recorrido encontramos excelentes ejemplares de alcornoques.
Encontramos también tramos con el empedrado antiguo.
Otro cruce señalizado.
Otro cruce señalizado.
En este otro cruce, nosotros dejamos el SLV 27 que se dirige al collado de la Íbola y nos vamos a la izquierda para emprender la subida al castillo.
Tras una ligera subida, empezamos a ver las primeras ruinas del recinto.
Y nos encontramos con esta torre de planta rectangular.
Se trata de la torre Albarrana.
Se trata de la torre Albarrana.
Como explica el panel, esta torre separada del conjunto defensivo era la encargada de la vigilancia de la vertiente sur del cerro en el que se enclava el castillo.
La peña Pastor desde el castillo de Benalí.
Y llegamos hasta el recinto amurallado.
Observamos que están reconstruyendo tramos del lienzo de la muralla.
Observamos que están reconstruyendo tramos del lienzo de la muralla.
Y accedemos hasta la cilíndrica torre del homenaje, en bastante buen estado.
Interior de la torre del homenaje.
Vistas de Aín desde el patio de armas.
La torre del homenaje en su cara norte.
Muralla en restauración.
Restos en la cara norte.
Aín desde este hueco en la muralla del castillo de Benalí.
Panel informativo del castillo.
El castillo de Benalí fue uno de los núcleos de resistencia más importantes de Espadán en la expulsión de los moriscos allá por el año 1609.
El castillo de Benalí fue uno de los núcleos de resistencia más importantes de Espadán en la expulsión de los moriscos allá por el año 1609.
Aín a vista de pájaro desde el castillo.
Volvemos por el mismo camino de la ida, disfrutando tranquilamente de la senda ahora de bajada.
Nuevos ejemplares de alcornoque llaman nuestra atención.
Y , como comenté antes, en el desvió del GR 36 junto a este nogal, nos desviamos a la derecha.
Una corta subida nos lleva hasta esta pista. El GR 36 sigue a la derecha hacia el Collado de Barres. Nosotros lo dejamos y giramos a la izquierda para regresar cómodamente a Aín por pista. Así evitamos hacer la vuelta por el mismo camino que la ida. El panel nos indica claramente el camino a seguir.
Entre pinos y alcornoques nos vamos acercando a Aín y podemos verlo en algunos puntos del camino.
Encontramos algunas setas durante el recorrido, pero no somo entendidos.
La ermita del Cristo del Calvario, donde estuvimos antes, en las cercanías de Aín cada vez más cerca.
Otro cruce que seguimos de frente, como nos indica la señal metálica, aunque por la izquierda también llegaríamos a Aín. Pero seguiremos de frente para visitar el paraje de la fuente de San Ambrosio.
Y nuevamente un cruce con señal. Izquierda.
El camino nos lleva hasta el cauce del río, que cruzaremos para entrar a Aín por el lavadero municipal.
Pero antes de entrar en el pueblo, nos acercaremos hasta la fuente de San Ambrosio, pasando por el área recreativa que se encuentra junto a ella.
Aquí los paelleros.
Aquí los paelleros.
Fuente de San Ambrosio.
Mesas de este área recreativa.
Bonito paraje para detenerse a descansar y disfrutar del entorno.
Entramos a Aín pasando junto al restaurado Molinet y el lavadero que veis en la foto.
Pasamos por la iglesia de San Miguel.
Y, tras pasar de nuevo por la plaza del Ayuntamiento, nos dirigimos hacia el aparcamiento.
Y , finalmente, en el aparcamiento, ponemos punto y final a este bonito y entretenido paseo que nos ha hecho disfrutar doblemente: por un lado, la belleza de la sierra de Espadán y por otro, del importante legado cultural que guarda toda esta zona y que debemos conservar y conocer para que no se olvide.
La ruta en el mapa.
La ruta en el mapa.
La ruta en Wikiloc.
Hola Emilio.
ResponderEliminarTras pasar una bonita y soleada mañana en el monte un encuentro como el que tuvimos hace que uno se vaya a casa con mejor sabor de boca aún.
Me alegré volver a verte y saber de primera mano que esas rodillas se están recuperando.
Con las últimas lluvias y el ambiente otoñal este tramo de senda al castillo, y toda la sierra en general, están esplendorosos, no es de extrañar que ese jueves hubiese tanta gente en Aín.
Mira si hace tiempo que no subo al castillo, estuve tentado el jueves, que no sabía que lo estaban restaurando, ni que habían puesto esos paneles, habrá que volver a escaparse en breve a Aín, que siempre es una gozada caminar por sus blancas calles.
Un abrazo.
¡Hola, Dani! Fue un inesperado y grato encuentro. Siempre es agradable encontrarse con monstruos como tú (no lo digo por lo feo, que conste) en la montaña (y fuera de ella). Pues tengo que decir que yo también hacía mucho que no subía al castillo y disfrute mucho de la corta ruta. Mis rodillas, ya heridas de hace mucho tiempo, no se resintieron demasiado y pude volver a disfrutar de Espadán como me gusta. Aín siempre vale la pena volver. Es un pueblo maravilloso, aunque su bar no esté a la altura.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Emilio buena ruta para retomar la actividad.
ResponderEliminarSencilla, entretenida y bonita
Espero que tus rodillas te dejen de ahora en adelante continuar con normalidad tus salidas.
Un abrazo
Y por cierto ese árbol no es un castaño ..... es un nogal jejeje
¡Hola, José Ramón! Efectivamente, una sencilla ruta pero para mí, fue todo un rutón después de tantos meses sin poder salir. Gracias por la rectificación. Ya sabía que era un nogal, pero algún duende se me cruzó y puse castaño (recordaba los que hay en la vertiente norte de Espadán). Si no me lo comentas, me pasa desapercibido. Ahora mismo lo corrijo. Gracias por decírmelo.
EliminarUn abrazo.
Ya me extrañaba a mí que no publicaras nada desde Pirineos, reportaje con Casiaventurilla (precioso y entrañable, por cierto) aparte.
ResponderEliminarEspero y deseo que este parón te haya servido para recuperarte totalmente ... y por lo visto en esta escapadita a Aín parece que así ha sido de lo cual nos alegramos.
Y por lo que veo, después de las últimas lluvias Espadán está para comérselo ...
Un abrazo.
¡Hola, Paco!Desde Pirineos no había podido hacer nada. Estuve más de mes y medio cojeando ostensiblemente. Poco a poco he ido mejorando. A ver hasta cuando aguantan mis rodillas. De momento, con rutas sencillas me conformo. El reportaje de Casiaventurilla (genial) lo rodamos en el mes de junio.Y, efectivamente, Espadán está precioso.
EliminarUn abrazo.
Bueno otro 3mil. te saluda y te felicita por ese volver a renacer de tus montañás y castillos, asi pues va mi felicitación y mis mejores deseos.
ResponderEliminarSaludado quedas
¡Hola, Emilio! Muchas gracias por tus palabras, deseos y felicitaciones. Espero que se cumplan.
EliminarSaludos.
Hello Emilio!
ResponderEliminarUna sencilla y amena excursión para ir testeando esa rodillas que tanto quebradero te dan. Poco a poco y sin forzar, iras alargando los kilómetros ;))
Pues para decirte la verdad, en varias ocasione he pasado por debajo del castillo, pero nunca subí hasta el. Esta entrada, me ha permitido conocerlo de manera fotográfica. Y seguramente la próxima vez que vaya por allí, subiré.
Ahh y bonito encuentro con el "monstruo" de Dani, jeje.
Saludos y a por otro sendero.
¡Hola, Javi! Ya te comenté en Montanejos que quería probar las rodillas poco a poco. La subida al castillo de Aín ha sido un buen ejemplo para probar. Corta, pero en Espadán cualquier ruta es bonita. Además, el entrañable encuentro con Dani puso un plus al estupendo día que pasé.
EliminarSaludos, Javi.
Hola Emilio. Nos alegramos mucho de que te encuentres mejor. Ya verás como poco a poco te vas recuperando. Nosotros como siempre de pueblo en pueblo. A ver si a la vuelta podemos compartir contigo una caminata!!!
ResponderEliminarUn abrazo
¡Hola, María! Muchas gracias por tus palabras. A viajeros no os gana nadie. A ver si es verdad que cuando volváis nos hacemos alguna rutilla.
EliminarUn abrazo para Carlos y un beso para ti.
¡Hola Emilio!
ResponderEliminarMe alegra ver que tus rodillas se van recuperando poco a poco.
Muy bonita ruta, que no por ser corta o sencilla hace desmerecer un entorno tan bonito como el de Aín.
Si es que Dani está en todas partes, tan pronto está en Espadán, como en la Serranía de Cuenca o los Pirineos... jejeje
Ánimo y a seguir recuperándote.
Un abrazo.
¡Hola, David! Bonita ruta, aunque sencilla. Disfruté mucho de ella ya que cuando estás mucho tiempo sin poder salir a la montña por lesión, cuando mejoras te vale cualquier cosa con tal de poder caminar. Feliz encuentro con Dani. Me llevé una grata sorpresa ya que, como dices, no esperas verlo porque supones que puede estar en cualquier parte de España.
EliminarUn abrazo.
Hola Emilio...
ResponderEliminarExtrañado andaba yo también de que no publicaras nada,al margen de ese fantástico reportaje con los compis de CasiAventurilla,desde la travesía pirenaica y ya sabemos porque.
La verdad es que yo tampoco ando muy sobrado de tiempo para visitar los diferentes blogs que sigo,entre ellos el tuyo,pero bueno...
Ruta fácil y con todo el encanto de la Sierra de Espadán,sin duda,el que has utilizado de test y por supuesto,que es un recorrido para iniciarse y engancharse a la montaña.
El pueblo de Aín,precioso,como pocos,me encanta y vaya sorpresa,encontrarte con Dani.En cuanto a lo que comentas del bar,corroboro,que en nuestra ultima visita,no nos fuimos nada contentos...
Que siga por buen camino esa recuperación y a ver si volvemos a poder coincidir en esa montaña,que tanto nos gusta.
Un abrazo.
¡Hola, Juane! Está claro que cada vez más nuestro físico influye en la posibilidad de hacer más o menos rutas, o incluso ninguna. Nos iremos resegnando poco a poco. De momento, parece que las rodillas me dan otra tregua y aprovecharemos para seguir caminando. Una ruta corta pero con el encanto especial de la sierra de Espadán y del maravilloso pueblo de Aín. En cuanto a lo del bar, no sólo es una queja mía. He visto multitud de quejas de muchos usuarios por diferentes motivos. Pero bueno, eso es un mal menor y no dejaremos de ir a Aín por ese tema.
EliminarUn abrazo.