Comenzamos esta primera etapa del Tour del Aneto con gran expectación, aunque sabemos que tenemos el espectáculo asegurado. Caminar por Pirineos no es cualquier cosa, es disfrute y diversión garantizados. Efectivamente así fue. No nos decepcionó en absoluto la etapa, llena de desnivel, dureza, contrastes y paisajes maravillosos que llenaron nuestras retinas para quedarse para siempre reflejados en ellas. Los verdes de praderas, abedules, hayas, robles...se quedarán para siempre en nuestro recuerdo.
La primera etapa de nuestra aventura nos llevará desde el aparcamiento de Ulhs deth Joèu hasta el Hospice de France, lo que supone que en esta primera etapa pasaremos al país vecino. Nos podemos preguntar el por qué de que comience aquí este Tour en lugar de hacerlo en Viella. Al parecer la razón es que el final de esta primera etapa estaría en el Refugio de la Artiga de Lin, pero éste se encuentra en reforma y ampliación y no permite la pernoctación. Es de suponer que cuando esta reforma sea efectiva se podrá ampliar la ruta con esta nueva etapa.
Pues de buena mañana nos encontramos en el punto de inicio. Un taxi nos ha traído hasta aquí.
Los aventureros de izquierda a derecha: Jaime, Rafa, Ricardo (arriba) y servidor y Emilio Romero (abajo).
Descendemos por un corto camino que nos deja en esta espectacular cascada que hace aquí el río Joèu. Son los llamados "Ojos del Joèu".
Tras unos largos instantes (el furor de lo nuevo), proseguimos la ruta cruzando este puente sobre el río.
Iniciamos un sendero escalonado y con barandillas de madera que nos sube paralelos a la cascada, cuyo rumor nos acompaña durante la ascensión.
Por encima de las copas de los árboles empezamos a ver las primeras cimas, acompañadas por una tardía luna que ante tal espectáculo de la naturaleza remolonea para no esconderse todavía.
Enseguida nos asomamos al valle, que se despereza todavía tras la fresca noche. Hoy se ha despertado con sonidos poco frecuentes. El piar de los pájaros o el ulular del viento han sido sustituidos por las voces de ánimo de los espectadores y participantes en un trail de montaña de los que tan de moda están ahora.
Paletas direccionales que nos acompañarán durante el recorrido en los cruces o enlaces con otros itinerarios.
Voces de ánimo y aliento a los participantes, ocupaban todos los rincones del valle.
Nosotros dejamos la algarabía y nos vamos hacia la derecha.
Frente a nosotros vemos la Cabana de la Artiga de Lin, dentro de breves instantes pasaremos a su lado.
Nueva paleta que nos redirige al Refugio de la Artiga.
Bordeamos el refugio y seguimos a la izquierda junto a esta paleta al lado de la fuente. A partir de aquí una larga y empinada subida nos espera hasta el Coll de l'Infern.
Pasamos una de las vallas electrificadas que encontraremos durante varias etapas, siempre teniendo cuidado de dejarlas cerradas.
El sendero nos lleva hasta el punto en el que hemos de cruzar el rumoroso caudal del arroyo de la Canaleta del Pomèro. Dos puentes nos ayudan a sortearlo: uno antiguo de madera o el moderno puente colgante que salva el barranco.
Ahora habremos de subir la Canaleta de Pomèro. La pendiente poco a poco se intensifica.
El valle es muy largo. Parece que tenemos cerca el collado, pero éste no llega nunca.
El valle es muy largo. Parece que tenemos cerca el collado, pero éste no llega nunca.
Llegamos a otro enlace que nos llevaría a la Cabaña de Pomèro y al lago de Pomèro. Nosotros seguimos hacia arriba, buscando el collado.
Seguimos nuestra ascensión poco a poco, resoplando a veces porque aunque no lo parezca, la pendiente se las trae.
Llega el momento del descanso y el almuerzo. Las distancias en el Pirineo son relativas. El desnivel es el que decide y avanzar con pendiente es más lento. Es necesario parar y retomar fuerzas.
Al poco de reanudar el camino, Rafa, con visión privilegiada y habilidad manifiesta captura una ranita en un punto del arroyo que baja por la vaguada.
Parece que quede menos.
Nuevamente nuestro compañero Rafa se percata de la presencia de un oficio y consigue sujetarlo para poder fotografiarlo. ¿Una víbora tal vez?. Tras la foto, lógicamente, dejamos al reptil seguir su camino que vio interrumpido con nuestra presencia.
Nuevamente nuestro compañero Rafa se percata de la presencia de un oficio y consigue sujetarlo para poder fotografiarlo. ¿Una víbora tal vez?. Tras la foto, lógicamente, dejamos al reptil seguir su camino que vio interrumpido con nuestra presencia.
Preciosas vistas del Pirineo.
Nuevo enlace, nuevo poste direccional. Seguimos dirección al collado de la Monjoia.
Nuevo enlace, nuevo poste direccional. Seguimos dirección al collado de la Monjoia.
Ahora hemos de subir un poco más por el llamado Pas dera Escaleta, que nos lleva a un punto más alto.
A nuestra izquierda, encontramos este pilón (encontraremos más en este tramo) que marca la frontera con Francia.
Al llegar arriba, dejamos un momento el sendero y nos desviamos a la izquierda para subir hasta este punto donde estos dos pilones marcan la frontera con Francia.
Al llegar arriba, dejamos un momento el sendero y nos desviamos a la izquierda para subir hasta este punto donde estos dos pilones marcan la frontera con Francia.
Desde aquí podemos subir opcionalmente al Tuc de la Escaleta que tenemos a la vista a nuestra derecha, pero no entraba dentro de nuestros planes.
Ahora únicamente nos queda descender hasta el fondo del Valle de la Frèche para llegar hasta el Hospice de France. Tenemos dos opciones. Una por nuestra izquierda que desciende por la izquierda del valle de manera muy directa hasta el Hospice. La otra, algo más larga, desciende por su vertiente derecha pasando primero por la Cresta de Crabidès hasta llegar al collado de la Monjòia (límite con Francia) y desde aquí, en paulatino descenso, nos llevará hasta el Hospice de France pasando antes por un tupido y precioso bosque que nos dejará junto al cauce del río Pesson y desde aquí, hacia la derecha, llegaremos por un camino hasta el final de esta dura pero espectacular etapa. Nosotros elegimos esta segunda opción.
De momento no lo notamos en nada.
Este pilón o hito, también fronterizo, marca el inicio de la cresta de Crabidès que seguiremos hasta el collado de la Monjoia.
Este pilón o hito, también fronterizo, marca el inicio de la cresta de Crabidès que seguiremos hasta el collado de la Monjoia.
A nuestra izquierda observamos el sendero de la otra opción más directa que baja por aquella vertiente del valle.
El Etang de la Frèche con aguas azul turquesa, aunque no sé si nos atreveríamos a bañarnos en sus preciosas aguas.
El calor va haciendo mella, pero no nos preocupa. Estamos disfrutando con lo que nos gusta.
La punta del pico de la Pique destaca sobremanera entre las demás cimas.
La punta del pico de la Pique destaca sobremanera entre las demás cimas.
El Paisaje nos encanta. Las fotos van cayendo una tras otra. Unas 2100 fotos en total (16 gigas) son el testimonio de nuestra travesía.
Pasamos junto a una fuente de agua muy fría que no viene muy bien para sobrellevar el calor que hace y mojar nuestras gorras.
Pero primero no introduce en un frondoso, tupido y fresco bosque por el que caminaremos hasta una cabaña en el valle.
El sendero nos deja cerca de esta cabaña. Pero nosotros giramos a nuestra derecha. Ahora sí que enfilamos la recta final.
Este panel nos habla de la historia de este antiguo refugio.
Y este es nuestro cuarto, que nos permitirá descansar y recuperar fuerzas para la etapa de mañana, que se prevé durilla también.
Vistas de la subida al Portillón de Benasque que nos espera mañana desde la ventana de nuestra habitación, con mi rodillera ortopédica como artista invitada. Pero esa será otra historia que ya os contaré.
Han sido 13,64 Km de recorrido con un desnivel positivo de 1202 m y un desnivel negativo de 1209 m y mis piernas lo han notado. Ya no son las mismas de hace unos años, pero la ilusión las mantiene con ganas. Espero que mañana me vuelvan a responder, al menos como lo han hecho hoy.
El sol empieza a ponerse en el paraje del Hospice de France. Ahora toca cenar y descansar. Otro excelente día de senderismo nos espera mañana. Con esa ilusión nos despertaremos y con esa ilusión espero contaros la segunda etapa.
Entrada relacionada:
La ruta en Wikiloc.
Hola Emilio.
ResponderEliminarPreciosa esta primera etapa del Tour del Aneto, pasando de las bellas montañas aranesas a las no menos atractivas de Luchon. Paisajes de postal en todo momento, y además con un primer contacto visual con el protagonista de la travesía, el rey Aneto. Esperamos el siguiente repor, para ver como es la subida francesa al Portillón de Benás.
Un abrazo.
¡Hola Dani! En esta primera etapa empezamos a vislumbrar lo que sería esta travesía. Paisaje idílicos nos acompañaron durante toda la ruta preludiando las maravillas que nos esperaban en las siguientes jornadas. a ver si tengo tiempo y editamos la segunda etapa.
EliminarUn abrazo.
Hola Emilio
ResponderEliminarImpresionante toda esta zona, poco mas que decir de esas vistas de todo lo que te rodea mientras caminas a esas alturas. Es normal que fundieras la tarjeta de memoria 2100 fotos jajaja. Yo me pensaba que solo me pasaba a mí jajaja.
Y sobre tu rodilla o tus piernas, estoy seguro que aunque cansado (porque es normal), pero habrá respondido bien, en este ambiente muchas veces nos olvidamos de los dolores y la ilusión nos mueve sin acordarnos del dolor.
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
¡Hola Jose! Como le decía a Dani, impresionante jornada que fue el aperitivo de lo que tenía que venir. Si decimos que Espadán no defrauda, imagínate Pirineos. Por cierto, me comentó David Bonilla (A una chapa del cielo) que coincidisteis un día.¡Hay que ver qué pequeño es el mundo!
EliminarUn abrazo.
Hola, querido Emilio, el prólogo que has realizado de la travesía de Pirineos de este año, es solo un anticipio para tus fieles seguidores, los cuales vamos a estar ansiosos de ver la publicación pormenorizada de cada uno de los días. Una travesía, como la que tuvimos suerte de realizar hace cuatro años, preciosa y bellísima por sus paisajes y extraordinaria por los componentes de la misma, a quiénes aprovecho para darles las gracias por ese compañerismo que ha reinado durante todo el trayecto y que ha conseguido que la disfrutemos en toda su intensidad.
ResponderEliminarA pesar de la dureza de alguno de los días, te diré que, como reza el título de una famosa canción de Marc Anthony,..."Valió la pena".
Espero, si la edad y el tiempo lo permite, poder volver a realizar otra de idénticas características junto con todos vosotros.
Un fuerte abrazo.
Ricardo Vivó Ramos
¡Hola Ricardo! Desde luego que disfrutamos de lo lindo. La dureza de la travesía no evitó que la disfrutáramos plenamente.Excelente equipo con el que espero repetir muchas más travesías, siempre que el físico aguante y nos respete.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hola Emilio...
ResponderEliminarPues como primera etapa de ese Tour del Aneto,solo puedo decir ¡¡impresionante!!...No quiero ni pensar los adjetivos que tendré que poner para las siguientes...jajaja.
Desde luego que la conjunción belleza y desnivel,queda bien reflejada en lo que nos has contado en la crónica y también imagino,que ese nivel ira ''in crescendo'',conforme pasen las etapas.
Por cierto,no entiendo mucho,pero ese reptil,creo que es una víbora hocicuda,te hago el apunte,porque fotografié una igual en la Sierra del Toro,haciendo el Cerro del Baile y me dijeron su nombre,en un comentario...
En cuanto a esa rodilla,no se como estarás ahora,pero si nos vas a contar las seis etapas,es porque aguanto o la hiciste aguantar...jejeje.
Ah,lo de las fotos,me lo imaginaba...jajaja,viendo el prologo,ya te había hecho un comentario al respecto.Afortunadamente,hoy en día,las tarjetas de memoria aguantan lo que les echemos...jajaja.
Un abrazo.
¡Hola Juane! Lo cierto es que todas las etapas tenían alicientes superlativos para disfrutar de ellas. Lo iré relatando próximamente e intentaré plasmarlo lo más fielmente posible aunque como bien sabes por experiencia, lo vivido supera con creces a lo escrito o fotografiado. En este caso también se cumple. Difícil explicar con palabras las sensaciones que tanta maravilla te produce. Pienso también que la serpiente era una víbora. En cuanto a mi rodilla, se portó bien, pero tal vez estoy abusando de ella porque alguna molestia me dejó en días posteriores, pero "que me quiten lo bailado". Y las fotos, no te digo nada, era un no parar (bueno sí, parar para hacerlas claro, pero una tra otra).
EliminarUn abrazo.
Hola Emilio.
ResponderEliminarUn inicio de tour muy prometedor, empezando en la Uelhs deth Joèu, que a nosotros nos encanto y desde el que ya se puede ver todo el glaciar del Aneto, pasando por esos prados pirenaicos, con esas fantásticas vistas, y terminando en tierras francesas, pasando por un espectacular hayedo. Poco más se puede pedir!
Punto y aparte es el refugio, vaya habitación más bien cuidada, y con unas vistas de escándalo, así cualquiera descansa.
Un saludo.
¡Hola Eduardo! Desde luego, como etapa inicial no estuvo nada mal: paisajes de ensueño, verdes de todas clases, desnivel importante... Una maravilla. Lo cierto es que es una travesía muy homogénea en el sentido de que todas las etapas tienen elementos suficientes que las hacen únicas y diferentes.
EliminarUn saludo.
¡Hola Emilio!
ResponderEliminarImpresionante esta primera etapa, la verdad es que el Pirineo nunca decepciona.
Una auténtica pasada el contraste de esos verdes valles con la majestuosidad de las torres que os rodean.
Ya hay ganas de leer la siguiente crónica.
Un abrazo.
¡Hola David! Desde luego, el Pirineo es otra dimensiòn. Disfrute total en cualquier caso. Iremos desgranando las demás etapas en cuanto podamos.
EliminarUn abrazo.
Grande EMILIO!
ResponderEliminarEsperando la publicación de la segunda etapa.
Un abrazo
¡Hola José Vicente! Excelente etapa. Vamos a por la segunda.
EliminarUn abrazo.
Hello Emilio.
ResponderEliminarFantástica primera etapa, con esos praderías verdes que dulcifican el esfuerzo de alcanzar el collado. Y una vez en el; espectáculo de primera; el macizo de Maladeta (en la foto estas entre el Aneto y el Maldito,foto para recordar)
Y bonita esa bajada al Hospice, por ese hayedo que a buen seguro os dio buena sombra.
Pues nada,a ver la segunda etapa.
Saludos.
¡Hola Javi! Como dice David (y decimos todos), el Pirineo nunca defrauda. Excelente etapa difícil de olvidar con el verde como motivo y las cimas nevadas del macizo de la Madaleta que asomaban y que me flanqueban en la foto como bien explicas.
EliminarSaludos.
Hola Emilio:
ResponderEliminarMagistral relato (en tu línea habitual) que con certera descripción nos deleita y nos hace recordar lo vivido en estas lindes. Qué lástima que el Pirineo no esté más cerca pues hollaríamos en ella constantemente. Deseoso estoy de leer los siguientes capítulos de nuestra aventura.
Un fuerte abrazo.
Emilio Romero
¡Hola, Emilio! Gracias por tus palabras, pero no es para tanto. Intento contar a la gente mi experiencia lo mejor que sé. Si sirve para algo, ya me siento contento. Lástima, como comentas, de la lejanía de los Pirineos. Estaríamos allí todas las semanas. Bueno, por aquí también tenemos sitios que nos encantan. Seguiremos narrando.
EliminarUn fuerte abrazo.