STA. BÁRBARA DE PINA (15/12/2012)

Santa Bárbara de Pina era otra de las cimas que deseaba visitar antes de terminar el año. Desde hace mucho tiempo, he pasado por su base y elevaba mis ojos hacia su cumbre y pensaba: "buenas vistas habrá desde ahí arriba". Bueno, pues este sábado fue el día elegido para realizar este deseo. Os lo contaré a continuación...

Con sus 1405 m de altitud es una de las mayores alturas de Castellón, aunque en Wikipedia y en el panel explicativo del PR V-62 a la salida de Pina lo catalogan como la segunda altura de la provincia.Esto no es así, pues según comentó Jose Ramón (Trotasendas) en mi anterior entrada del Gorgo, hay otras cimas de mayor altura que Sta. Bárbara de Pina, como el Cabezo de las Cruces con algo más de 1700m.

Sea como fuere, la cuestión es que este sábado tocaba ascender a Pina. Seguiríamos el ya citado PR V-62, ruta circular de unos 17 km, que partiendo desde la población de Pina de Montalgrao, nos llevaría primero a la Cueva Cerdaña, después a las inmediaciones del Mas de Noguera, a continuación, a la cima de Sta Bárbara, objetivo de esta ruta y finalmente de nuevo a Pina. Unas 6 horas de recorrido alternando pistas, caminos, sendas y paisajes que hicieron nuestras delicias.

A las 8,30, con un cielo cubierto de nubes y una temperatura muy agradable, llegamos a Pina por la autovía Mudéjar, desviándonos  en la salida 57 hacia Barracas y nada más entrar en Barracas, a la derecha en dirección a Pina por la CV 207 durante 2 km, para, finalmente, desviarnos a la derecha por la CV 209 durante otros 2 km hasta  llegar a la población de Pina. Atravesamos su sencillo y pequeño casco urbano y aparcamos en una calle amplia a la salida del pueblo.

Pina de Montalgrao pertenece a la comarca del Alto Palancia, está ubicado en las faldas de la Sierra de Espina, lindando ya con tierras de Teruel. Se encuentra a 1039 m de altitud, en el altipalno de Barracas.

El pueblo, apenas amanecido aún, nos recibió silencioso y quedo.

Senderistas de izq. a der. Rafa senior, Jaime, Rafa junior y servidor.

Iniciamos la ruta y seguiremos en todo momento las señales blancas y amarillas del PR V62 que no abundan. Encontraremos paletas de dirección que nos guiarán en todo el recorrido.Nos dirigimos hacia la slida del pueblo en dirección a la Fuente Vieja y el Lavadero. allí encontramos el panel informativo del PR V-62, con perfil, descripción de la ruta y flora y fauna.

La bonita "Fuente Vieja" a la salida de Pina.

El remozado lavadero.

 Panel informativo del PR que vamos a recorrer.

Y Sta. Bárbara de Pina, a nuestra izquierda, a donde subiremos a la vuelta.

Seguimos la paleta en dirección a Cueva Cerdaña, nuestro primer objetivo.

El cielo continua nublado, no hace nada de frío y el sol aún no se ha asomado. Nuestro caminar se hace ligero por la pista asfaltada que nos llevará al alto de los molinos, que vemos frente a nosotros.

Caminamos animados y ligeros. Acabamos de empezar y tenemos ganas de caminar.

Pasamos junto a la sencilla ermita de la Virgen de Gracia, patrona de Pina (S. XIV).

La pista dejó de estar asfaltada y se tornó en tierra.Los molinos nos esperan.

La montaña observa nostálgica el mas abandonado que tanta vida y actividad tuviera antaño. Hoy sus restos son únicamente el vestigio de una época dura y feraz en la que el hombre luchaba con la naturaleza para subsistir, únicamente subsistir.

Los gigantes molinos extienden sus largos brazos no sabemos muy bien si para atraparnos o recibirnos.

La pista va ascendiendo con suavidad y nos conduce al parque eólico "Alto de las Casillas".Nos fotografiamos junto a estos gigantes sin ver en ellos un enemigo, aunque su aspecto y runrun nos inquiete. No sabemos que pensaría Don Quijote si levantara la cabeza.¿ Se enfrentaría en buena lid contra semejantes enemigos?

En el Alto de las casillas encontramos otro corral ruinoso, contrastando con los modernos molinos que ahora tienen un protagonismo que el corral ya ha perdido para siempre. ¿Les pasará lo mismo a estos molinos dentro de algunos años?. Junto al corral, otra paleta nos sigue dirigiendo hacia la Cueva Cerdaña. En ligero descenso serpenteamos por la pista en su busca.

A algunos centenares de metros llegamos a este bonito rincón de la Fuente Cerdaña, un pozo preparado para poder extraer a la antigua usanza la vivificante y necesaria agua. El lugar era propicio para realizar una foto de grupo.No siempre encontramos pozos en nuestras rutas.

En este punto del pozo, la pista se convierte en senda que nos va a conducir a la cueva Cerdaña. Se adentra la senda en una bonita pinada rodeando el alto de Cerdaña.

Nos apetecía ya caminar por senda. La pista es cómoda, pero la senda nos ofrece un caminar más entretenido y gratificante.

En algún recodo nos presenta excelentes vistas del valle del Palancia en su recorrido al mar. En primer plano podemos ver la población de Caudiel. Al fondo la Calderona.

En otro recodo asoma tímidamente Montán.

La senda transcurre junto a altos escarpados de roca en los que tuvimos la suerte de contemplar un numeroso rebaño de cabra montesa, de al menos diez individuos en varios grupos que recorrían con agilidad y diligencia las verticales paredes de piedra. En la foto podemos ver unos de los ejemplares que nos mira con curiosidad.

A escasos metros del sendero, hacia nuestra derecha, encontramos la Cueva Cerdaña. Un poste de madera nos lo indica.La cavidad tiene dos entradas cercanas una a la otra. Se ha de entrar por la de la izquierda que tiene un acceso fácil. La de la derecha tiene una altura grande que salvar y no es viable. No necesitamos linterna ya que entra luz suficiente por los orificios de las entradas. Además las nubes se han ido disipando y el sol comienza a aparecer tímidamente.

Una columna divide en dos el tramo de entrada.

En el interior encontramos una gran sala presidida por una enorme columna desde el suelo hasta el techo de la caverna al que parece estar sosteniendo.

Cuirosas formas aprarecen aquí y allá para ser fotografiadas por nuestras cámaras y poder mostrar a quienes no la han visitado, todas las maravillas que encierra esculpidas por el agua y el tiempo.

Después de entretenernos un buen rato en la cueva decidimos almorzar en la salida, desde donde podemos contemplar excelentes vistas.

Momento del almuerzo.

Frente a nosotros el Alto de las Palomas, donde estuvimas la semana pasada (Caudiel-Cirat).

Terminado el almuerzo, retomamos la senda que empieza a descender zigzagueando y con algo de pendiente y al poco tiempo se cierra un poco y entra en zona de pinos crecidos tras el incendio de l992.

Vamos descendiendo por una cerrada senda donde los pinos luchan por conseguir un espacio vital.

La senda va a desembocar a una pista. Si la seguimos a la derecha llegamos en pocos minutos al Mas de Noguera: granja-escuela, alojamiento rural, centro de actividades en la naturaleza... Nosotros nos desviamos a la izquierda en dirección de nuevo a Pina de Montalgrao. Este tramo de camino coincide durante algo más de un km con el GR 7.

Mas de Noguera.

Al llegar a la pista nos desviamos a la izquierda siguiendo las marcas del PR.

Este poste marca la continuidad del GR 7 hacia Montán si lo seguimos hacia la derecha. Nosotros seguiremos rectos siguiendo nuestro PR. Pina al fondo, nos espera.

A partir de aquí el camino es senda que transita por la umbría de la sierra y nos presenta aún matices otoñales, ocres y dorados que contrastan con el verde de las especies perennes.En este tramo encontramos abundantes ejemplares de Quercus Pyrenaica (rebollos o melojos), cuyas hojas marcescentes no caen hasta que las empujan las yemas de las hojas nuevas.Ello le da un bello colorido a todo el recorrido.

Uno de los muchos rebollos que encontramos en este tramo de senda.

Esta rústica fuente está al lado del sendero.

La senda, en un momento dado, va ascendiendo hasta superar un collado, que nos llevará al otro lado.

La senda se ensancha convirtiéndose en pista. Al rato volvemos a divisar Pina ante nosotros.

Continuamos por la pista y vamos poco a poco acercándonos al pueblo y a Sta. Bárbara.

Junto a la pista encontramos este viejo poste de dirección. Si le hacemos caso nos lleva a un bancal en el que no vemos senda. Hemos de continuar una veintena de metros y vemos a la derecha el inicio de la senda que comienza a ascender hacia Sta. Bárbara.

La senda al principio transita por una zona de espinos y aliagas que cierra el camino y hace que nos pinchemos un poco.

La senda sigue en ascenso y se introduce en un precioso bosque por el que transitaremos casi hasta el final.

Todo el pinar está replantado. El suelo está completamente cubierto de pinocha, lo que dificulta seguir el sendero.Hay que estar pendiente de las marcas.

 El sendero cruza una pista varias veces y llega hasta el área recreativa de la Pimpollada, con paellero o torrador y mesas.

Continuando el sendero se cruza una pequeña vaguada y giramos a la derecha para enfilar el último trecho. La senda es preciosa como puede verse.

El último tramo hasta el final no deja tregua. Asciende sin descanso con bastante pendiente y de vez en cuando hay que parar a tomar aliento.a medida que ascendemos, los pinos se hacen más escasos.

En algún descanso, miramos al horizonte y vemos en la lejanía levantarse la cima del Montgó.

Un último esfuerzo nos lleva hasta la cima y lo primero que nos encontramos es esta zona de picnic.

Además encontramos unas antenas, una caseta de vigilancia forestal, un vértice geodésico elevado sobre un pilar bastante alto, un pequeño refugio con mesas y aljibe y la sencilla ermita de Sta. Bárbara que da nombre a la montaña.

 

 Rafa junior en el vértice geodésico.

 En la cima se encuentra este pequeño refugio con aljibe.

Y uno, ante lo que ve, piensa: ¿cómo es posible tanta belleza?.

Las vistas desde el alto de Sta. Bárbara son de las que más he disfrutado hasta el momento. En todo su radio podías contemplar vistas espectaculares: el alto de Barracas con Javalmbre de fondo, la sierra de Toro, Peñascabia, la Calderona, el valle del Palancia, la sierra de Espadán, el Alto Mijares,Penyagolosa,el mar Mediterráneo...

Miraras por donde miraras, el espectáculo estaba garantizado.Los Calpes en el centro de la imagen, con la redonda y el Cantón de Campos de Arenoso (pueblo cubierto por el embalse de Arenoso) detrás.

Majestuoso y señorial, el señor de estas tierras nos muestra su poderío.

Castillo de Villamalefa encaramado en la ladera de la montaña.

Penyagolosa de fondo, un poco más abajo el Morrón de Campos y a su derecha la Rosada de Montanejos, entre ambos se abre camino el barranco de la Maimona.

Hacia el sureste, el pantano del Regajo también es visible desde Sta. Bárbara.

 Hacia el este, tenemos esta bonita perspectiva del barranco del Mas del Moro, que desemboca en el río Montán.

La sencilla ermita de Sta. Bárbara, objeto de dos romerías al año: una el 4 de diciembre, día de Santa Bárbara y otro el 22 de mayo, día de Santa Quiteria.

Y cómo no, desde lo alto podemos contemplar la estampa de Pina de Montalgrao, a los pies de Sta. Bárbara.

Después de disfrutar durante un largo rato de las vistas hacia todos lados (la vista no daba abasto para contemplar el amplio horizonte que se abría ante nuestros asombrados ojos) nos dispusimos a bajar. Seguimos el mismo camino que  de sabida. Ahora la bajada se hace más rápida, pero al mismo tiempo, dada la pendiente, se ha de bajar con cuidado ya que las articulaciones sufren más.El retorno fue, si cabe, más fabuloso. La frondosa pinada volvió a impresionarnos gratamente y disfrutamos de su silencio y su paz. Salimos de nuevo hasta la pista desde donde nos dirigimos ya directamente hacia el pueblo.

Atrás quedaba la solitaria cima de Sta. Bárbara que tan buena impresión nos había causado.

Finalmente, Pina ante nosotros.

Sobre las 2,30 regresamos al punto de partida. Fueron 6 horas de ruta intensas, divertidas e inolvidables. Desde la cueva Cerdaña, hasta las vistas que disfrutamos desde Pina colmaron nuestras expectativas e hicieron que pasáramos un sobresaliente día de senderismo.

 

 Como suele ser habitual, paramos a comer en un restaurante de Barracas. Había que reponer fuerzas después del esfuerzo del día.

Aquí podéis ver alguna de las delicias que comimos, para que os hagais una idea.

Resumiendo, una sobresaliente ruta de unos 18 km y 6 horas de recorrido con la única dificultad de subir a la cima de Pina casi al final, después de llevar unos 13 km de ruta. Tal vez, si se hace el recorrido al revés, al subir a la cima al principio, puede que se note menos el cansancio.Es conveniente llevar agua, a pesar del pozo Cerdeña y la fuentecilla junto a la senda, porque la potabilidad de estas fuentes no está garantizada. Aunque a mitad, podemos acudir al Mas de Noguera en caso de necesidad.

Película

Galería fotográfica.