La entrada que presento no es una ruta de senderismo propiamente dicha. Se trata más bien de un bonito paseo que, tanto veraneantes, como vecinos de Montanejos, suelen realizar con mucha frecuencia; unas veces como paseo relajante, otras como si de una ruta del colesterol se tratase o bien como recorrido para entrenar. En cualquier caso, se trata de un bonito paseo del que podemos disfrutar ampliamente por el maravilloso entorno natural por el que transcurre. Se trata del tramo que va desde la localidad hasta el embalse de Arenoso.
Trataré de comentaros el recorrido para que aquel que lo realice pueda disfrutar y conocer mejor este bonito trayecto.
Como casi todas mis rutas por la zona, saldremos desde el centro del pueblo: la Plaza de España.
Aquí podemos cargar agua.
En la glorieta (así se conoce este rincón), encontramos otra fuente.
Aquí mismo vemos el Horno Collado, donde podemos avituallarnos muy bien tanto de dulce como de salado.
Enfrente del horno, pasamos junto a uno de los establecimientos hoteleros del pueblo: el hotel Xauen.
Junto al hotel, esta finca peculiar y con solera que se conoce en Montanejos como la finca de los Navarros.
Apenas hemos dejado atrás la finca de los Navarros, a nuestra derecha, la preciosa imagen de la cima de La Copa.
Al otro extremo del puente se encuentra el Albergue "El Refugio".
Pero antes de sobrepasar el puente, nos asomamos al pretil primero a la izquierda para disfrutar de la vista sobre la Rosada.
Seguimos, después de entretenernos unos momentos en el puente sobre el Maimona, por el paseo que lleva hasta la Fuente de los Baños. Este tramo nos hará disfrutar de un bonito paisaje tanto a la derecha, como a la izquierda o de frente, donde vemos el Morrón de Campos destacando sobre el resto.
Pasamos frente el inicio de varios senderos: de los Castillejos, de los Estrechos, de la Cueva Negra y el reciente sendero familiar.
A nuestra derecha, La Copa, referente durante todo el tramo llama nuestra atención. Desde aquí también vemos el campo de Fútbol municipal y alguna de los pocas huertas que aún se cultivan.
Pasamos por esta salida que nos llevaría hasta el campo de fútbol y las huertas que hemos visto.
Y llegamos hasta el aparcamiento de la Fuente de los Baños, vacío a estas tempranas horas, pero que no tardará en saturarse enseguida.
Aquí encontramos la bajada a la Fuente de Baños. El panel cerámico nos informa de las propiedades medicinales de las aguas que aquí manan: "Aguas mineromedicinales sulfatado magnésicas y bicarbonatadas, indicadas para enfermedades de la piel, aparato digestivo y riñón". Nosotros pasaremos de largo. Es habitual en verano que a la vuelta, después del paseo, se baje a tomar un baño.
Continuamos pues dirección al pantano. Aquí vemos la bajada hacia la Fuente.
Hemos de decir que, a partir de aquí, caminamos por la carretera CV-20 a Puebla de Arenoso por lo que lo correcto es caminar por la izquierda. La costumbre es que la gente lo haga por la derecha por inercia y porque las vistas son espectaculares. En cualquier caso caminaremos con mucha precaución.
Hemos de decir que, a partir de aquí, caminamos por la carretera CV-20 a Puebla de Arenoso por lo que lo correcto es caminar por la izquierda. La costumbre es que la gente lo haga por la derecha por inercia y porque las vistas son espectaculares. En cualquier caso caminaremos con mucha precaución.
También disfrutamos desde la carretera de las vistas sobre las transparente y limpias aguas de la Fuente de Baños. ¿Quién puede resistirse a darse un baño en tan privilegiado lugar?
Seguimos caminando y disfrutando del entorno. En una curva, al otro lado del río, vemos esta pequeña cueva o abrigo que se conoce como el Refugio de Rufino. Sirvió para recoger ganado. Se puede visitar si realizamos el Sendero familiar, o yendo desde la Fuente de Baños.
De nuevo, la poderosa imagen del Morrón se hace patente.
De nuevo, la poderosa imagen del Morrón se hace patente.
Nos vamos acercando al estrecho de Chillapájaros. Y vemos el dique de la presa de Cirat.
Estas escaleras junto a la cuneta de la carretera, bajan hasta la fuente de la Zorrica. En la actualidad está seca. Hace algunos años que está así.
Estas escaleras junto a la cuneta de la carretera, bajan hasta la fuente de la Zorrica. En la actualidad está seca. Hace algunos años que está así.
Acercamos con el zoom el dique de la presa de Cirat.
Seguimos caminando y dejamos a la izquierda el enlace con el Sendero familiar.
Seguimos caminando y dejamos a la izquierda el enlace con el Sendero familiar.
Y apenas pasado este enlace, nos encontramos con el primero de los tres túneles que vamos a atravesar en este paseo.
Apenas sobrepasado el túnel, encontramos a mano derecha la bajada hasta la presa de Cirat.
Si bajáramos a la presa, podríamos volver a Montanejos por un sendero que parte desde la presa por la orilla izquierda del río. también podríamos acceder a la Fuente de Baños.
Nosotros seguimos hacia el embalse y desde la carretera fotografiamos el dique de la presa.
Si bajáramos a la presa, podríamos volver a Montanejos por un sendero que parte desde la presa por la orilla izquierda del río. también podríamos acceder a la Fuente de Baños.
Nosotros seguimos hacia el embalse y desde la carretera fotografiamos el dique de la presa.
A nuestra izquierda, altas paredes de caliza flanquean la carretera. Todas estas verticales paredes estás llenas de vías de escalada. No es de extrañar que en alguno de estos paseo veamos escaladores en pleno ascenso.
Las altas paredes de los Estrechos nos invitan a detenernos unos momentos y disfrutar de este entorno. Tampoco es de extrañar que viéramos algún escalador colgado de sus paredes. En Montanejos hay una gran cantidad de vías de escalada repartidas por diferentes zonas (ésta es una de ellas) capaces de satisfacer al más exigente.
Unos metros antes de llegar al espectacular tajo del Estrecho de Chillapájaros, se habilitó hace poco tiempo una pequeña zona de aparcamiento que permite aparcar algunos vehículos para acercarse a disfrutar de esta belleza natural.
Unos metros antes de llegar al espectacular tajo del Estrecho de Chillapájaros, se habilitó hace poco tiempo una pequeña zona de aparcamiento que permite aparcar algunos vehículos para acercarse a disfrutar de esta belleza natural.
Y a pocos metros del aparcamiento, encontramos este mirador que permite asomarnos a este bello rincón del Alto Mijares.
Estrecho de Chillapájaros.
Estrecho de Chillapájaros.
Y aquí nos entretendremos los minutos que queramos ensimismados en el espectáculo maravilloso que la naturaleza ha ido esculpiendo poco a poco en una labor de miles y miles de años.
Justo junto al mirador nos encontramos con el segundo de los túneles que atravesamos en este paseo. Por cierto, el más largo de ellos.
En su interior, dos balcones se abren hacia el estrecho de Chillapájaros. La luz que penetra en el túnel hace que la visibilidad sea buena, pero habremos de transitar con mucha precaución por él .
En su interior, dos balcones se abren hacia el estrecho de Chillapájaros. La luz que penetra en el túnel hace que la visibilidad sea buena, pero habremos de transitar con mucha precaución por él .
Salimos del túnel y continuamos por la carretera.
El paseo es muy agradable. Aprovechamos y disfrutamos del entorno que nos envuelve.
Y aparece ante nosotros el último de los túneles, en esta curva de la carretera.
El paseo es muy agradable. Aprovechamos y disfrutamos del entorno que nos envuelve.
Y aparece ante nosotros el último de los túneles, en esta curva de la carretera.
A la salida de él nos encontramos con esta espectacular vista de la salida del nuevo desagüe construido para "adecuar el embalse de Arenós de forma que este cumpla con los requerimientos
exigidos en el Reglamento técnico de Seguridad de Presas".
Otra imagen que podemos ver es ésta: las paredes de la cara norte del Morrón.
Otra imagen que podemos ver es ésta: las paredes de la cara norte del Morrón.
Caminamos unos metros por la carretera hasta encontrar a la derecha el desvío de la senda de los Estrechos, por la que bajaremos.
Antes de bajar observamos un grupo equipándose para realizar una actividad de rafting en el tramo de río que va desde el chorro del aliviadero hasta el embalse de Cirat.
Por el ramal de la izquierda bajaríamos hasta el mismo chorro (¡ojo, nos mojaríamos!). Nosotros vamos por la derecha para acercarnos a él por una pasarela que accede a la sala de máquinas del aliviadero. En un corto tramo de esta pasarela también nos llegan algunas gotas.
En el primer tramo de la pasarelas también nos mojamos un poquito. Pero avanzamos casi hasta el final.
En el primer tramo de la pasarelas también nos mojamos un poquito. Pero avanzamos casi hasta el final.
Y nos acercamos hasta el potente chorro del aliviadero. Hay que decir que puede que esta fuerza no sean tan intensa. Depende de la cantidad de agua que la Confederación del Júcar crea conveniente desembalsar según las necesidades.
Esta vista del Morrón nos acompaña en este tramo.
Seguimos por la carretera que llevamos y en este punto, seguiremos por la derecha por una pista de tierra que nos lleva hasta coronar el dique del pantano. Este camino evita el tramo de carretera hasta arriba y acorta un poco la distancia y el tiempo.
Seguimos por la carretera que llevamos y en este punto, seguiremos por la derecha por una pista de tierra que nos lleva hasta coronar el dique del pantano. Este camino evita el tramo de carretera hasta arriba y acorta un poco la distancia y el tiempo.
Habremos de seguir la pista en subida hasta el embalse.
No tardaremos en ver la imponente mole del dique del embalse formada por miles de grandes rocas sacadas de una cantera situada en la ladera del Morrón y un núcleo de arcilla compactada, también extraído de una cantera cercana.
No tardaremos en ver la imponente mole del dique del embalse formada por miles de grandes rocas sacadas de una cantera situada en la ladera del Morrón y un núcleo de arcilla compactada, también extraído de una cantera cercana.
A medida que la pista asciende, vemos asomar la parte superior de la Peña Redonda por encima de la pared del dique.
También es muy habitual ver merodear por los riscos del Morrón a bandadas de buitres sobrevolando la zona.
También es muy habitual ver merodear por los riscos del Morrón a bandadas de buitres sobrevolando la zona.
Ya nos queda menos.
Antes del último repecho nos encontramos con esta fuente. Si tenemos suerte de encontrarla con agua, os recomiendo beber de ella por lo fresca y buena que es. Por desgracia, en años de sequía suele estar seca.
Antes del último repecho nos encontramos con esta fuente. Si tenemos suerte de encontrarla con agua, os recomiendo beber de ella por lo fresca y buena que es. Por desgracia, en años de sequía suele estar seca.
En apenas una treintena de metros salimos a la parte superior del dique.
Aquí nos detenemos unos instantes a disfrutar de esta preciosa vista. En esta ocasión el nivel del agua es bastante alto por lo que el pantano muestra esta bella imagen. Normalmente a finales de verano suele presentar un nivel más bajo o si el año ha sido escaso en lluvias su nivel tampoco es el óptimo. En esta ocasión hemos tenido suerte y podemos disfrutar de un embalse casi lleno.
Aquí nos detenemos unos instantes a disfrutar de esta preciosa vista. En esta ocasión el nivel del agua es bastante alto por lo que el pantano muestra esta bella imagen. Normalmente a finales de verano suele presentar un nivel más bajo o si el año ha sido escaso en lluvias su nivel tampoco es el óptimo. En esta ocasión hemos tenido suerte y podemos disfrutar de un embalse casi lleno.
Si nos fijamos en un cerro frente a nosotros y agudizamos la vista o extendemos el zoom de nuestra máquina, podremos distinguir claramente las ruinas del castillo de la Viñaza que se asoman a las aguas del pantano con un silencio de siglos.
Aquí podemos apreciarlas mejor.
Aquí podemos apreciarlas mejor.
Panorámica del embalse de Arenoso.
Seguimos por la carretera que corona el dique y llegamos hasta esta puerta metálica puesta hace poco (2017) y que estuvo cerrada al principio. Parece ser que luego la han mantenido abierta para el paso de la gente que pueda hacer alguna ruta por la otra parte del embalse. Un decisión que se agradece.
Seguimos por la carretera que corona el dique y llegamos hasta esta puerta metálica puesta hace poco (2017) y que estuvo cerrada al principio. Parece ser que luego la han mantenido abierta para el paso de la gente que pueda hacer alguna ruta por la otra parte del embalse. Un decisión que se agradece.
Nos vamos a acercar por curiosidad hasta las compuertas del nuevo aliviadero construido para su adecuación a la nueva normativa hidráulica.
Este sería el inmenso desagüe de este aliviadero que nos produce una sensación de vértigo al asomarnos a él.
Y, aunque no se aprecia con claridad en la fotografía, hasta media docena de buitres (había alguno más fuera del encuadre de la cámara) sobrevolaba nuestras cabezas.
También nos podemos entretener leyendo este interesante panel que nos da información sobre Campos de Arenoso, el pueblo que quedó anegado por las aguas del pantano allá por el año 1977.
Tras disfrutar de las vistas hasta que creamos necesario, sólo nos queda volver por donde hemos venido y terminar en Montanejos esta bonita ruta. Aún así, aunque ya conocéis el camino que nos ha llevado hasta aquí y la vuelta es por el mismo sitio, os haré algunos comentarios más dado que siempre encontramos elementos nuevos que nos harán hacer más ameno este tranquilo paseo.
Al bajar de nuevo por la pista que nos llevó hasta el embalse, vemos este hongo yesquero en el tronco de un pino que en la subida nos pasó desapercibido. Fijaos en su gran tamaño.
El paseo es ameno y agradable. Sin prisa además, se disfruta mucho más del camino.
El paseo es ameno y agradable. Sin prisa además, se disfruta mucho más del camino.
Vemos descender aguas abajo al grupo que vimos un rato antes. Sus gritos histéricos y risas trémulas nos advierten de su presencia y nos informan de lo bien que lo están pasando y de la incertidumbre que experimentan en estas aguas bravas que les arrastran inexorablemente.
Nosotros los dejamos y seguimos nuestro camino.
Poco a poco sus risas van perdiendo intensidad apagadas por la distancia que vamos tomando respecto a ellos y van quedando como un eco lejano y apagado.
Al llegar de nuevo a la altura de la Fuente de Baños, nos acercamos al pretil de la carretera para ver y escuchar cierta algarabía que los bañistas y visitantes de hoy producen debido a la diversión y disfrute que experimentan al bañarse en estas límpidas y tibias aguas.
Poco a poco sus risas van perdiendo intensidad apagadas por la distancia que vamos tomando respecto a ellos y van quedando como un eco lejano y apagado.
Al llegar de nuevo a la altura de la Fuente de Baños, nos acercamos al pretil de la carretera para ver y escuchar cierta algarabía que los bañistas y visitantes de hoy producen debido a la diversión y disfrute que experimentan al bañarse en estas límpidas y tibias aguas.
Seguimos caminando y paramos un instante para centrarnos en la cima de La Copa. Nos entretenemos en realizar un zoom para captar el mirador al que tantas veces nos hemos asomado.
De nuevo, pero ahora de vuelta, pasamos por el inicio de varias sendas de la población.
De nuevo, pero ahora de vuelta, pasamos por el inicio de varias sendas de la población.
Y un poco más abajo, otro tramo de río al que nos asomamos también.
Pasamos sobre el Maimona y nuestra vista se eleva de nuevo hacia la Rosada, recordando ese aéreo sendero de la Bojera por el que tantas veces hemos caminado también.
Pasamos sobre el Maimona y nuestra vista se eleva de nuevo hacia la Rosada, recordando ese aéreo sendero de la Bojera por el que tantas veces hemos caminado también.
Y un nuevo vistazo hacia la desembocadura del Maimona, que vierte ya un escaso caudal al Mijares después de haberlo hecho de forma más abundante meses atrás.
Y, finalmente, la Avenida Fuente de Baños nos devolvía de nuevo a la Plaza de España, principio y fin de nuestro paseo. Espero que os haya gustado.
Y, finalmente, la Avenida Fuente de Baños nos devolvía de nuevo a la Plaza de España, principio y fin de nuestro paseo. Espero que os haya gustado.
La ruta en el mapa.
Parece mucho mas larga, el marco precioso, es una excursión que suele hacerse muy a menudo es bonita.
ResponderEliminar¡Hola, Emilio! Es un paseo muy agradable. El entorno ayuda mucho a que así sea. Recomendable en verano prontito o al final de la tarde cuando el sol no calienta tanto. Se puede terminar con un baño en la Fuente.
ResponderEliminarSaludos.
El sendero es por la carretera?
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