“El hombre es cuerpo, mente y alma, pero también es todo lo que toca y todo lo que hace. Los sitios que visita el hombre son el hombre mismo. Sus pasos son él, el sendero que recorre también es él. No puedes estar en el Camino sin que el Camino no esté en ti.” (“El Camino Mágico de Santiago”, Xosé Azofra Carballo). Una nueva etapa de nuestro camino, ese camino que somos nosotros mismos. Nuestros pasos son nosotros mismos y el camino que recorremos también forma parte de nosotros.
El Camino del Salvador o de San Salvador lleva a los peregrinos desde León hasta Oviedo. Su origen se encuentra en el S.VIII cuando el rey Alfonso II “El Casto” decidió reunir en la catedral de Oviedo, dedicada a San Salvador, las reliquias del territorio español con la finalidad de protegerlas de la invasión musulmana. Por este motivo los peregrinos acudían allí a visitar tales reliquias y venerar al Salvador. Cuando los caminos Primitivos y del Norte fueron perdiendo afluencia en favor del Francés, muchos peregrinos siguieron desviándose a Oviedo desde León para seguir venerando las reliquias. Esto dio origen al Camino del Salvador y dio lugar al conocido refrán de que “quien va a Santiago y no al Salvador, honra al criado y olvida al Señor”. Desde Oviedo los peregrinos que se habían desviado a Oviedo podían continuar a Santiago siguiendo el Camino Primitivo. Con la realización del camino del Salvador el peregrino recibe la Salvadorana que acredita la peregrinación.
Desde Mieres a Oviedo coincide con un tramo del GR-100 "Ruta Vía de la Plata" que va desde Sevilla a Gijón.
Nuestras etapas del Camino del Salvador coinciden básicamente con el recorrido oficial, aunque pueden presentar alguna variación en función del lugar en el que pernoctaremos o, de evitar tramos engorrosos, peligrosos o innecesarios. En general, el camino está bien señalizado y podemos seguirlo sin track, aunque es conveniente ser conocedor de alguna variante que nos pueda interesar.
Emprendemos esta cuarta etapa ya en tierras asturianas. Es una etapa rompepiernas hasta la localidad de Campomanes por las constantes subidas y bajadas aunque nosotros la vamos a minimizar porque haremos un tramo por la N-630 desde Puente de los Fierros hasta Campomanes evitando el desnivel de ese tramo de camino oficial y la bajada vertiginosa a Campomanes. Desde esta población el recorrido es llano y cómodo prácticamente hasta Pola de Lena por un camino que transcurre paralelo al río Lena, aunque en el kilómetro veinte aproximadamente, a la altura de la ermita de Santa Cristina, que no visitamos, dejaremos también el camino oficial para seguir por carretera siempre con el río Lena a nuestra derecha. El camino oficial va por el otro lado del río. La bajada desde Pajares a San Miguel del Río tiene una fuerte pendiente y si el suelo está mojado bajaremos con precaución. A tener en cuenta también que en el kilómetro 6,5 de la etapa, después de pasar un abrevadero, veremos la opción de seguir por la variante de Monestiriu, que sólo es apta para montañeros y por lo tanto deben abstenerse los peregrinos. Hasta Campomanes no encontraremos servicios.
Nos alojamos en Pola de Lena en el hotel Ruta de la Plata de Asturias.
- 125 km en seis etapas.
- 2165 m de desnivel positivo.
- 2769 m de desnivel negativo.
- 28 h 34 min tiempo en movimiento.
- 33 h 19 min tiempo total.
DATOS DE LA SEGUNDA ETAPA
- 24,23 km.
- 218 m de desnivel positivo.
- 910 m de desnivel negativo.
- 4 h 47 min tiempo en movimiento.
- 6 h 59 min tiempo total.
La etapa pasa por:
- San Miguel del Río 2 km.
- Santa Marina 3,4 km.
- Llanos de Somerón 5,8 km.
- Puente de los Fierros 10,5 km.
- Renueva 14,1 km.
- La Frecha 15 km.
- Campomanes 17,2 km.
- La Vega'l 22 km.
- La Pola fin de etapa.
- Puente de los Fierros 10,5 km.
- Renueva 14,1 km.
- La Frecha 15 km.
- Campomanes 17,2 km.
- La Vega'l 22 km.
- La Pola fin de etapa.
Llovió por la tarde del día anterior y tal vez por la noche y hacía frío. Al salir de la pensión para empezar la etapa comprobamos que las montañas del Puerto de Pajares estaban nevadas en pleno mes de mayo. Entramos ya de lleno en tierras asturianas que nos llevarán hasta Oviedo.
Bonita estampa la que nos encontramos al inicio de la etapa con la nieve blanqueando la cima de las montañas.
"Siempre habrá nieve altanera
que vista el monte de armiño
y agua humilde que trabaje
en la presa del molino.
Y siempre habrá un sol también
un sol verdugo y amigo
que trueque en llanto la nieve
y en nube el agua del río."
León Felipe
Aún queda algún miembro por salir para empezar la larga etapa de hoy.
Nuestros pasos se dirigen a la calle de abajo de la pensión donde se encuentra la iglesia de San Miguel.
Pasamos delante de su fachada.
"En el negro callejón
donde en tinieblas paseo,
alzo los ojos, y veo
la iglesia, erguida, a un rincón."
Poco más adelante me encuentro con una sorpresa al leer esta losa de piedra en la fachada de esta casa. En ella pasó su niñez el insigne Ramón Menéndez Pidal. Nunca te acostarás sin saber una cosa más.
Seguimos la calle hacia abajo.
Pasamos junto al albergue de peregrinos de Pajares.
Disfrutamos del paisaje que nos rodea con las montañas nevadas.
Pasamos por la fuente de La Pría.
La calle desemboca en la carretera N-630 por la que apenas andaremos cien metros porque nos desviaremos por un camino a la izquierda en fuerte bajada.
Empezamos a bajar con cuidado por lo resbaladizo del suelo debido a la lluvia del día anterior y el fuerte desnivel de bajada.
Bajando echamos un vistazo al Puerto de Pajares.
Contemplamos también este grupo de vacas que aún no se ha levantado.
Hemos de ir frenando porque el desnivel es tan grande que nos lleva las piernas sin querer.
La bajada tiene aproximadamente kilómetro y medio y tiene un desnivel negativo de 260 m.
Pajares se va quedando arriba.
La bajada en cierta tensión para no resbalar y caer no lleva a pensar lo mucho que llevamos caminando en esta vida.
"Hemos andado despacio, sin acabar nunca.
Salimos una madrugada, hace mucho, oh, sí, hace
muchísimo
Hemos andado caminos, estepas, trochas, llanazos.
Las sienes grises azotadas por vientos largos. Los
cabellos enredados en polvo, en espinas, en
ramas, a veces en flores."
Vicente Aleixandre
Preciosa la vinca major.
Nos pareció verla llorar por esas lágrimas en sus pétalos. ¿Cuál será su pena?
Entramos casi corriendo en San Miguel del Río, en el fondo del valle.
Este edificio sería, sin duda, la antigua escuela.
Seguro que ya no hay niños en San Miguel que alegren sus callejuelas.
"Salen los niños alegres
de la escuela,
poniendo en el aire tibio
del abril, canciones tiernas.
¡Que alegría tiene el hondo
silencio de la calleja!
Un silencio hecho pedazos
por risas de plata nueva."
Federico García Lorca
Frente a la antigua escuela, la iglesia de San Miguel del Río. Pocas misas se realizarán también aquí.
Pasamos por un pequeño puente el río Pajares. Este río, poco más adelante, unirá sus aguas con el río Huerna dando lugar al río Lena.
Ahora seguiremos esta señal que nos lleva por una carretera local.
La carretera va paralela al río.
Pasamos por un corral y nos paramos para ver a estas cabras encima de un contenedor de basura. El refrán dice que la cabra tira para el monte, pero vemos que también lo hace para otras cosas.
A unos ochocientos metros de San Miguel del río tomamos un desvío a la izquierda. No debemos seguir por la carretera porque nos llevaría hasta la N-630 a un tramo peligroso sin arcén.
Cruzamos el río por este puente.
Río Pajares.
"En mi patria hay un monte.
En mi patria hay un río.
Ven conmigo."
En mi patria hay un río.
Ven conmigo."
Pablo Neruda
Hemos ascendido por la pista. Llegamos a esta fuente-abrevadero y poco más arriba llegaremos a Santa Marina.
Lo primero que nos encontramos es su iglesia.
Seguimos por la parte alta del silencios pueblo.
Estos gatitos no deben tener muchos ratones. Están medio adormilados. Pensábamos que era el comité de recepción de peregrinos pero creo que no, porque apenas se han inmutado a nuestro paso.
"Pero su orgullo ciégale insensato:
tiene el instinto y el rugir del tigre,
mas Dios no le hizo tigre, sino gato."
Manuel del Palacio
Desde Santa Marina, con zoom conseguimos esta foto de la estación de esquí de Valgrande-Pajares. La nieve aún cubre la cima.
"Duro es tu corazón como el granito;
mi corazón como la cera tierno:
verano ardiente soy; tú helado invierno;
tú nieve eterna; fuego yo infinito."
Pedro Antonio de Alarcón
Seguimos por las calle de Santa Marina.
Y salimos por un sendero bonito y muy frondoso, pero bastante embarrado.
Nos adentramos en un precioso sendero por bosque.
Pasamos junto a este roble centenario que hace detenernos unos instantes.
"Se tú como ese roble: que la herida
que abra en tu pecho el dardo de la suerte
sin causarte escozor sane enseguida."
Julio Flórez
Mayor frondosidad es imposible.
El sendero no tiene desperdicio. Eso sí, las botas se nos llenaron de barro.
En el sendero tendremos que cruzar algún arroyo.
(foto de Voro)
Unas bonitas aguileñas moradas destacaban sobremanera entre las mil tonalidades de verde.
El agua sale por cualquier parte.
En medio de este frondoso bosque los pensamientos se amontonan.
"En los bosques, perdido, corté una rama oscura
y a los labios, sediento, levanté su susurro:
era tal vez la voz de la lluvia llorando,
una campana rota o un corazón cortado."
Pablo Neruda
Los avellanos formaban parte también de este espléndido bosque.
Pasamos esta cancela. Recordad que las cancelas se deben volver a cerrar tras nuestro paso para evitar salida de ganado. Salimos ahora a un tramo entre prados. Un amenazante mastín que cuidaba caballos nos ladró con furia y hasta temimos que se abalanzara sobre nosotros. Sólo se quedó en intención.
Salimos ahora a un tramo entre prados. Un amenazante mastín que cuidaba caballos nos ladró con furia y hasta temimos que se abalanzara sobre nosotros. Sólo se quedó en intención. La foto está hecha mirando hacia atrás. Antes, por el mastín, no me entretuve en sacar la cámara.
En esta mirada hacia atrás, seguimos viendo la estación de esquí desde aquí.
A cuatrocientos metros de la cancela, encontramos este lavadero. Ya estamos cerca de Llanos de Somerón. Apenas cien metros nos separan.
Antes de llegar a Llanos, nos fijamos en la ladera de enfrente donde aparece la población de Villar
Pasamos una cancela en la misma entrada del pueblo y encontramos este típico hórreo y una fuente-lavadero.
Aprovechamos la espera del resto del equipo para hacernos esta foto.
(foto de Voro)
Avanzamos por el pueblo. Llegamos hasta su iglesia de Santiago.
Frente a la iglesia este precioso tejo que adorna la plaza.
Otro precioso hórreo en la plaza que llama nuestra atención. Una pena que la mayoría de hórreos que vimos ya no se usen. Muchos de ellos se encuentran en mal estado de conservación.
El peregrino ha de hacer frente a las dificultades que se le presentan. Mirad Paco qué bien ha solucionado el problema de suelas a punto de despegarse. Aguantaron lo que faltaba de camino hasta O
Oviedo.
Salimos de Llanos de Somerón por la carretera local LN-12. Recorreremos unos cuatro kilómetros por ella en un tramo que se nos hará algo monótono, pero que agradecemos porque es en bajada.
A unos quinientos metros del pueblo, pasamos por esta fuente abrevadero.
A pocos metros de la fuente encontramos esta paleta que marca un desvío. Se trata de la variante de Monitiriu (PR-AS 99), una ruta de montaña que por su dificultad está recomendada únicamente a montañeros. Por lo tanto, no es conveniente seguirla a los peregrinos.
Seguimos pues carretera abajo. Apenas nos cruzamos dos coches en la bajada.
Aunque por asfalto, el paisaje que nos circunda nos alegra la vista y nos hace olvidar el alquitrán.
"El viento es un caballo:
óyelo cómo corre
por el mar, por el cielo.
Quiere llevarme: escucha
cómo recorre el mundo
para llevarme lejos."
Pablo Neruda
En la ladera de enfrente La Romia. Por estas aldeas no pasa el coche de Google Maps.
Nos da mucha pena comprobar la de casas y caserones deshabitados y maltratados por el tiempo y el abandono. Los tiempos gloriosos ya pasaron y la decadencia es evidente. Tomamos buena nota.
Y, por fin, encontramos la casita de Blancanieves. Aquí la vemos con los siete enanitos que van a dar un paseo.
Pocos metros antes de cruzar el río y llegar a Fierros, encontramos en este poste dos variantes. La más oficial va por la izquierda y conlleva mayor desnivel y terreno más malo. Por la derecha, el camino sigue la N-630, que nos recomendaron varias personas, entre ellas Yolanda, de la pensión de Pajares y Carmen la taxista de Campomanes, que no informó que tenía que recoger peregrinos lesionados por caídas al seguir por el camino oficial. La N-630 presenta un buen tramo con arcén, algo más tarde la evitaremos durante casi dos kilómetros por la antigua carretera sin tráfico y luego ya estamos prácticamente en Campomanes habiendo evitado desniveles y posibles caídas.
Pues lo dicho. Nosotros seguimos por la derecha por camino menos oficial.
Cruzamos el puente sobre el río Pajares.
Iniciamos el tramo por la nacional.
Se aprecia en la foto el andén protegido por una barandilla de metal que nos hace ir seguros.
El río Pajares a nuestra izquierda.
Junto a la carretera la capilla del Hospital de Peregrinos de San Bartolomé de Fierros.
Pasamos por debajo del viaducto del tren.
Seguimos ahora con cuidado por el arcén, que es ancho, pero ya no tenemos protección.
El rumos del Pajares nos saca un poco de la monotonía de la carretera.
Pasamos por el caserío de Renueva.
Doscientos metros después dejamos la nacional por la izquierda para seguir paralelos a ella por la antigua carretera.
Ahora caminamos más tranquilos y sin tráfico.
Estos gatos nos acechan a nuestro paso. No se atreverán a lanzarse contra nosotros. Ya veis que los peregrinos están expuestos a muchos peligros.
Las vacas viviendo plácidamente en su prado, atentas e indiferentes a nuestro paso.
Pasamos por la Frecha.
Mamá pata y sus patitos componen esta tierna imagen.
Nuevo hórreo.
Volvemos a la nacional ya en la entrada de Campomanes, aunque aún quedan algunos centenares de metros para llegar al núcleo urbano.
En Campomanes encontramos todos los servicios y buscamos donde poder tomar un bocado.
Y lo encontramos en el Bar La Báscula. Tomamos un buen pincho con su correspondiente cerveza.
Esto nos dio ánimos para seguir.
Seguimos nuestro camino. El peregrino no vuelve atrás, debe seguir siempre hacia su destino. Cruzamos la carretera buscando el río.
Aquí está el Pajares. Le quedan muy pocos metros para juntarse con el Huerna para convertirse los dos en uno solo: el río Lena.
Cruzamos el puente sobre el Pajares y seguimos por un bonito paseo por la izquierda paralelo al río
El panel nos informa que caminamos por la senda fluvial Campomanes-La Pola.
Desde ahora, vamos paralelos al río Lena.
Empieza a llover. Toca ponerse chubasqueros y ponchos porque la lluvia va a más.
Y mientras llueve, pensamos que esto no es nada.
“Ahora bien: todas las cosas tienen remedio, si
no es la muerte, debajo de cuyo yugo hemos de pasar todos, mal que nos pese, al
acabar la vida.” ("Don Quijote", Miguel de Cervantes)
"La cristalina corriente
de este caudaloso río,
lleva ya el llanto mío."
Mariano Melgar
El camino se aparta un poco del río Lena cuando llega a la A-66. El camino va paralelo a ella.
Aproximadamente en el kilómetro veinte, el camino gira a la derecha pasando por debajo de un túnel de la vía del tren y sube a la ermita de Santa Cristina y sigue después por ese lado hasta la entrada de La Pola. Pero nosotros volvemos a dejar el camino oficial para seguir por otro que nos interesa más, que es paralelo al oficial pero por el otro lado.
Pasamos por la estación de La Cobertoria. El edificio antiguo es actualmente un centro de interpretación del arte prerrománico asturiano.
Apenas sobrepasada La Cobertoria cruzamos una pasarela sobre la autovía, que quedará ahora a nuestra derecha.
A pesar de la cercanía a La Pola, el entorno rural no falta.
Seguimos por carreteras locales dirección a La Pola. La lluvia nos ha dado un respiro.
Pasamos por la Vega del Ciego
Vemos una ermita que ya no parece estar dedicada al culto.
Rodeamos una rotonda por la izquierda que tiene al medio estos personajes, "los Zamarrones", personajes tradicionales que participan en las fiestas locales.
Y entramos en La Pola.
Paseamos por sus calles en busca del hotel en el que pernoctaremos.
Pasamos por delante del Ayuntamiento de La Pola.
A escasos metros del Ayuntamiento, en la calle Vital Aza, nº 6 llegamos al hotel Ruta de la Plata de Asturias, que será nuestro punto de descanso de esta larga etapa de siete horas.
Nuestra habitación. Toca ducha y salida a buscar restaurante donde comer.
Lo encontramos en La Cava de los cinco, muy cerca del hotel.
Esto es lo que comimos. No estuvo mal.
El grupo en pleno esfuerzo. (Foto de Pascual)
Tras la comida, vuelta al hotel para descansar y recuperar fuerzas para la quinta etapa.
Volvió a llover por la tarde.
Chispeaba cuando salimos en busca de un lugar para cenar que no estuviera lejos del hotel.
Lo encontramos en la hamburguesería Ca'Zampola. Cena rápida para retirarse pronto.
Y aquí terminó el día. Ahora vuelta al hotel y descansar para el día siguiente, en una etapa no muy larga y sencilla que nos llevará hasta Mieres del Camino.
Pincha en el enlace para ver las fotos de la etapa.
Pincha en los siguientes enlaces para ver las diferentes etapas:
- 1ª etapa: León-La Robla.
- 2ª etapa: La Robla-Poladura de la Tercia.
- 3ª etapa: Poladura de la Tercia-Pajares.
- 5ª etapa: Pola de Lena-Mieres del Camino.
- 6ª etapa: Mieres del Camino-Oviedo.
La ruta en el mapa
La ruta en Wikiloc
Powered by Wikiloc
Película
No hay comentarios:
Publicar un comentario