DE MONTÁN A FUENTE LA REINA (19/9/2015)

Tras algo más de un mes inactivo por culpa de mis maltrechas rodillas, que me ha impedido caminar por la montaña, vuelvo a disfrutar de ella con una ruta en el Alto Mijares que me ha sabido a gloria, a pesar de su sencillez.. Se trata de una ruta circular que nos lleva desde la localidad de Montán hasta la de Fuente la Reina.

Realizamos esta ruta en el sentido de las agujas del reloj y presenta dos partes bien diferenciadas. Una primera algo más monótona que transcurre en su totalidad por pista hasta llegar a Puente la Reina; y una segunda parte más divertida y senderista que transcurre casi en su totalidad por bonitas y tupidas sendas. De ahí el recomendar hacerla en el sentido de las agujas del reloj.

Partimos desde la población de Montán, en la avenida de la Tejería, junto al antiguo convento de los  monjes servitas. Pero antes damos una vuelta por los alrededores y visitamos este lavadero a mayor altura que la calle que nos permite tomar una instantánea elevada de Montán.

 Lavadero .

 Vista de Montán, mientras amanece, desde el lavadero.

 Y como siempre, la foto de grupo.

De izquierda a derecha Paco Álvarez, Vicent, Carlos, Paco Bayarri y servidor.

Salimos dirección a la fuente de la Tejería. A los pocos metros encontramos la fuente del Chorrico.

 Fuente del Chorrico. 

Aquí podemos llenar las botellas.

 Llegamos enseguida a esta bifurcación. A la izquierda, encontramos el desvío a la fuente de la Tejería con propiedades sulfato-bicarbonatadas y área recreativa que se encuentra a escasos 50 m. Pero nosotros nos vamos por el ramal de la derecha dirección Fuente la Reina. La pista en principio está asfaltada. Luego será de tierra, aunque pasaremos un corto tramo de asfalto.

 Después de un tiempo en el dique seco no te importa caminar por pista o por donde sea. 

En estos momentos te das cuenta que lo que más te importa y te gusta es caminar, caminar, caminar...por donde sea.

 En este tramo encontramos campos de almendros, olivos, algarrobos...algunos de ellos muy bien cuidados. Otros, evidentemente, abandonados.

 También apreciamos la loma de un cerro que ha sufrido un pequeño incendio. 

Menos mal que no fue a más.

 Paramos junto a este corral junto a la pista para beber un poco y respirar.

 Hacia el oeste divisamos las inconfundibles antenas de Santa Bárbara de Pina.

Llegamos al paraje del Navajo Blanco.

En él encontramos mesas si queremos comer. Nosotros, dada la proximidad de Fuente la Reina (2 km), decidimos mejor ir al bar.

Paraje de Navajo Blanco.

El Navajo es un aljibe totalmente de piedra.

Aquí veis su interior.

Foto de grupo en el aljibe.

Enseguida divisamos Fuente la Reina.

Y caminamos por sus tranquilas y silenciosas calles.

Pasamos frente al Ayuntamiento.

Y llegamos a la plaza de la iglesia, donde se encuentra el bar y el centro neurálgico de esta pintoresca población. En la imagen, la iglesia dedicada a la Virgen de los Ángeles (S. XVII).

Tras el excelente almuerzo en el bar de la plaza, reemprendemos la segunda parte de la ruta, mucho más entretenida y vistosa que la que acabábamos de realizar.

Salimos de Fuente la Reina dirección Los Calpes. La carretera hace dos cerradas curvas en descenso.

Seguimos unos centenares de metros hasta llegar al vertedero clausurado. Aquí, por la derecha sale una senda que nos puede pasar desapercibida, pero que es evidente. Además vemos en la señal de tráfico la pintura amarilla y blanca de los PRs. Aquí comienza un PR que en la página de Montán denominan "Montán-Fuente la Reina" sin numeración.

 Se inicia aquí una exuberante senda entre pinos y carrascas que vamos a poder disfrutar prácticamente hasta regresar a Montán. Podremos seguir la senda con facilidad porque encontraremos las marcas de PR en todo el recorrido.

En algún claro del bosque, divisamos enfrente nuestro las paredes del barranco que el río Maimona ha esculpido  a su paso por esta localidad.

Un denominador común que vamos a encontrar en nuestro camino es la presencia de grandes troncos de pino caídos en medio de la senda que hemos de sortear con mayor o menor esfuerzo. Nada importante en todo caso, aunque no estaría de más que se quitaran. Este es el primero. Lo pasamos por encima.

Poco más adelante nos encontramos con este otro. Lo tenemos que pasar por debajo.

También encontramos algunos ejemplares de carrasca de buen tamaño.

Pasamos por diferentes parajes o partidas del recorrido que están señalizados.

Otro pino caído en mitad de la senda.

Y descendemos hasta el barranco de La Pudia, que lleva agua, de lo cual nos alegramos.

Antes de cruzarlo, encontramos esta indicación que nos desvía del camino. Decidimos seguirla hasta llegar a la anunciada fuente. Para ello nos adentramos unos cincuenta metros por el barranco hasta llegar a un bonito paraje donde encontramos la fuente.

Aquí tenéis la fuente, que mana por una teja en esta pequeña poza.
Desde aquí volvemos sobre nuestros pasos para retomar la senda.

Cruzamos fácilmente el arroyo y empezamos a ascender por una tupida senda.

Es muy agradable caminar por esta senda.

Seguiremos subiendo hasta enlazar con una pista.

Enlazamos con la pista y seguimos hacia la derecha. Transitaremos por ella durante un trecho.

Llegamos al collado Blanco.

A pocos metros  del collado Blanco llegamos a esta bifurcación que seguiremos por la izquierda.

Otro gran pino en medio del camino. 
Éste lo sorteamos por la derecha. Por la izquierda no tiene un paso fácil.

Llegaremos a un plano donde la pista gira a la derecha, pero nosotros seguiremos de frente buscando una senda que no se aprecia a simple vista porque la estaca que la marca es muy pequeña y no se bien. Nosotros dejamos un hito y pusimos unas estaca.

Este es el hito que dejamos para marcar el desvío a la senda. Lo completamos con una gruesa rama de pino para hacerla más evidente. Si os fijáis en la foto, a la derecha, a los pies de Carlos, se aprecia la pequeña estaca que marca el sendero.

Paraje de Hoya Zan.

La senda termina en una pista a la que bajamos por un pequeño terraplén de tierra suelta y resbaladiza que presenta unos rebajes a modo de escalones que ayudan a bajarla.

  Recorreremos, hacia la izquierda, de nuevo, un tramo de pista.

Pero enseguida volvemos a retomar de nuevo una senda esta sí bien marcada y visible porque está junto a la pista. Aunque como veis, las estaca también es de pequeño tamaño.

Descendiendo por la senda, en la lejanía, acercamos con el zoom estos restos de lo que parece ser una torre medieval cuya función se desconoce. Sería la torre de la Torrolvilla. Estos datos nos los proporciona Vicent, que nos acompaña y es gran conocedor del término de Montán ya que tiene casa aquí.

Y acercamos con el zoom las antiestéticas antenas del pico de Santa Bárbara de Pina.

Y caminando, caminando, llegamos hasta la fuente Amarilla, que como se indica en la placa de piedra tiene propiedades "Sulfato magnésico clorato carbonatada". Y curiosamente, al lado podemos leer el ya habitual cartel en las fuentes naturales de "Agua no potable". 

Aprovechamos para refrescarnos un poco.

Seguimos nuestro camino por pista dejando el desvío por el GR 7 a Montanejos.

 Poco más adelante nos vamos a la izquierda para llegar a Montán por la bonita senda de la Boscaja , que transcurre paralela al barranco del mismo nombre. Si nos fuéramos por la derecha, enlazaríamos con el tramo inicial que hicimos por la mañana. Pero es recomendables la primera opción.

Seguimos pues por la senda de la Boscaja que bordea a cierta altura el barranco del mismo nombre.

La senda es bastante tupida y está decorada en muchos puntos con artísticos hitos, obra de un vecino del pueblo (según Vicent) que tiene el gusto de hacerlas. En el último tramo, ya cercanos a Montán, aparecen hitos con los adornos derruidos, fruto al parecer de otros vecinos a los que no les gustan los artísticos hitos. Podrán gustar más o menos los hitos adornados, pero no creo que molesten ni hagan daño. No entenderé nunca lo de destruir por destruir.

Aquí veis uno de los hitos decorado.

Aquí veis otro de ellos.

Transitaremos también por una partida denominada, según el mapa del IGN, de la Pedrera, así denominada (según Vicent también) por ser de esta zona de donde se obtenían las piedras para la construcción del monasterio de los monjes servitas.

Seguro que estabais pensando que en esta ocasión no vimos el Penyagolosa. Pues estáis equivocados, aquí lo tenéis.

Tras un giro pronunciado de la senda hacia el norte, avistamos desde lo alto de la senda, la apiñadas casas de Montán. El pueblo nos recibió con una disparada que informaba del inicio de las fiestas patronales.

Panorámica de Montán antes de entrar en la población por el barrio de las Eras o de Santa Ana..

Montán desde la senda de la Boscaja.

Y ya entramos en la población  por la parte alta del barrio de las Eras.

Pasamos junto al edificio que fue el convento de los servitas que tiene esta iglesia adosada al mismo.

Aprovechamos para entrar a ver lo que fuera claustro del convento, que dejó de serlo con la desamortización de los bienes del clero del año 1836 promulgada por Mendizábal. En la actualidad está ocupado por viviendas de particulares.

Este rincón es el más conservado del antiguo claustro. El resto ha sido reformado.

Panorámica del claustro.

Pasamos también por la fuente de las Eras.

Y finalmente, sólo queda acercarnos a los coches para dar por terminada la ruta.

Resumiendo, bonita ruta recomendable para épocas donde el calor no apriete demasiado ya que su primera parte transcurre por pista que no siempre presenta sombra. La segunda parte, por el contrario, recorre sendas umbrías y frescas. Encontramos fuentes en Montán, al inicio y final de la ruta; en Fuente la Reina y la fuente Amarilla antes de llegar a Montán.

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La ruta en el mapa.

La ruta en Wikiloc.