Páginas

lunes, 2 de junio de 2025

VILAFAMÉS: POBLADO ÍBERO ELS ESTRETS-RACÓ DE RATA (31-5-2025)

 

“La ciudad siempre atrofia el espíritu y favorece que emerjan los sentimientos más viles.” (Ana María Sagi en “Mil ojos esconde la noche. Cárcel de tinieblas.” de Juan Manuel de Prada). Pensamos que esto es así y es por ello que necesitamos salir a la montaña, al campo, a la naturaleza...para que los sentimientos más viles que nos pudiera generar la ciudad, no se hagan evidentes o no emerjan.

Inspirados en la Ruta nº 2 de RUTES ECOTURÌSTIQUES VILAFAMÉS "Ruta 2: Poblat ibèric de Els estrets - Racó de Rata", que figura en la página del Ayuntamiento de Vilafamés, hemos realizado esta ruta que no se parece casi nada a la original salvo en el tramo de subida al poblado, cuya visita era nuestro objetivo.
Más que una ruta de senderismo, se trata de un paseo que transcurre por caminos rurales rodeados de almendros, olivos, algarrobos, encinas y algunas tablas con trigo. En el poblado nos recibe una torre defensiva circular. En el resto del cerro podemos ver casas, calles...de lo que fue el poblado que se enmarca cronológicamente entre los S. III - I a.C. Como la ruta es corta, al terminar, podemos visitar la población de Villafamés que guarda multitud de bellos rincones así como el Museo de Arte Contemporáneo y que por todo ello es uno de los Pueblos más bonitos de España dese 2015.


Aparcamos en la Cooperativa Vinícola de Vilafamés.


Como he comentado en el inicio, nuestra idea es visitar el poblado íbero de Els Estrets, pero sin seguir el trazado oficial que figura en la página de rutas del Ayuntamiento. Hemos buscado caminos alternativos que nos lleven allí. Nos dirigimos a la rotonda cercana a donde hemos dejado el coche.
(Foto de Emilio Romero)

Dirección hacia la rotonda encontramos este bonito mural en un muro de la cooperativa.


El mural tiene como objetivo mantener en el recuerdo colectivo la importancia de la enología en la formación de este bonito pueblo.


Bordeamos la rotonda por la izquierda para cruzar la CV-160 que lleva a Sant Joan de Moró.


Ya desde la otra parte de la carretera disfrutamos de esta bonita vista de Vilafamés, encaramada en un cerro, con el castillo dominando la población. A la derecha, el Morral.


A cien  metros de la rotonda dejamos el camino que llevamos para coger un camino rural que sale por la derecha.


Como buen camino rural vamos a disfrutar de la flora a manos llenas, con todo tipo de plantas y cultivos. Empezamos disfrutando con la belleza de esta escabiosa, perfecta y bella seguramente sin proponérselo, sin afectación ninguna, con sencillez.

"Voy camino de la tarde
entre flores de la huerta,
dejando sobre el camino
el agua de mi tristeza."

 Federico García Lorca



Caminamos plácidamente por llano del camino y porque aún el calor no nos aprieta.
Avanzamos en amena conversación.


Encontraremos en nuestro camino diferentes construcciones de campo, unas en mejor estado que otras.


Si antes fue una sencilla scabiosa, ahora son unas señoriales rosas las que me obligan a detenerme.
Belleza como la de la rosa, pocas. ¿Verdad?

"Para el pájaro el aire, para el musgo la roca,
los mares para el alga, mayo para la rosas,
que todo ser o planta va buscando
su natural atmósfera,
y sucumbe bien pronto si es que a ella
oculta mano sin piedad la roba."

                       Rosalía de Castro


También encontramos bellas matas de adelfas de varios colores. Ésta era blanca.
Las flores no presumen de su belleza, pero tampoco la esconden.


Otro ejemplo de construcción de campo de las muchas que salpican esta zona.


En el camino también fuimos encontrando diferentes árboles frutales, como por ejemplo membrilleros (Cydonia oblonga) como el de la foto.


Junto a esta masía en buen estado, vemos una viña.


Cantidad de semillas de diente de león estaban preparados para su viaje celeste sin rumbo fijo, con esta forma tan particular que la ayuda a llegar más lejos.


Hacia el norte veíamos muy difuminada la imagen del Penyagolosa.


Encontramos también preciosas encinas de gran porte como la de la foto.

Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas! ...
¿Adónde el camino irá?

         Antonio Machado


Encontramos también tablas con cultivo de cereal, que nos pareció trigo.


Cerca del kilómetro dos el camino transcurre paralelo al barranco de Moró, que no lleva agua pero que presenta evidencias de haber llevado no hace mucho.


Junto al camino este almez de buen tamaño.

"Un ave insólita canta
en el almez, dulcemente,
junto al agua viva y santa,
toda sed y toda fuente."

         Antonio Machado


No podían faltar en este muestrario floral las llamativas amapolas. ¿A quién se le pueden escapar de su mirada estas preciosas flores? Ese rojo pasión de sus pétalos son su mayor atractivo.

"Era ardiente porque daba
calores de rojo hogar,
y era sol porque alumbraba
y porque hacía llorar."

Antonio Machado


En el punto kilómétrico 2,3 enlazamos con el Camí dels Estrets, que seguiremos hasta la base del cerro donde se ubica el poblado íbero.


En la imagen, el Tossal Redó donde se encuentran las ruinas del poblado. Hacia allí vamos.


Más campos de trigo. El viento mueve las espigas dando la sensación de encontrarnos frente a un mar dorado cuyas olas se acercan a la orilla.

"Me han dicho, buen Florencio que deseas
ver un grano de trigo,
luego que sobre él cruza y recruza
la rueda corpulenta del molino:
¡pues, ven! ábreme el pecho:
que traigo en él un grano bien deshecho."

                                        José Martí


Sin prisa, pero sin pausa, como suele decirse, nos vamos acerando a nuestro objetivo de hoy.


Otra obra de arte de este museo natural al aire libre es esta solitaria flor de achicoria silvestre. 
Al parecer su flor tiene la propiedad de seguir la trayectoria del sol de modo similar al girasol y no se abre del todo más que a pleno sol.


También encontramos higueras descomunales, de gran tamaño, aunque sin higos.


Cada vez más cerca del cerro.


No somos tres. Somos cuatro. Ella viene siempre conmigo, aunque es tan discreta que no dice nada. Incluso muchas veces ni se deja ver, pero siempre está ahí.

"¡Esa sombra, mortal, que rauda pasa,
es la fugaz imagen de tu vida!"

              Francisco Villaespesa


Les canté la canción, pero no sacaron sus cuernos al sol.

"Las cochinillas de humedad,
las mariquitas de san antón,
también vagaba la lombriz
y patinaba el caracol."

            Rafael Alberti


Este pequeño tramo de sombra es ideal para refrescar las ideas.

“Has de poner los ojos en quien eres, procurando conocerte a ti mismo, que es el más difícil conocimiento que puede imaginarse.” ("Don Quijote de la Mancha", Miguel de Cervantes) 

Durante todo el camino estuvimos acompañados por juguetonas mariposas de todas clases y colores, que nos rodeaban como alegrándose de nuestra presencia. Pero lo cierto es que eran bastante esquivas a la hora de dejarse fotografiar. Aún así, siempre pillamos a alguna, como esta saltacerccas. Eso sí, está captada con zoom.

"Nadie envidiará tus galas
ni tu existencia dichosa,
pero yo sé, mariposa,
que alguien envidia tus alas..."

     Vicenta Castro Cambón



Y más encinas proporcionando algo de sombra, que no abunda en esta ruta precisamente.


Los últimos metros antes de llegar a la base del cerro caminamos junto al barranco de Els Estrets, como se puede ver por la abundante vegetación que encontramos en este tramo.
(Foto de Emilio Romero)


Accedemos a la base del cerro. Encontramos una flecha azul que marca el camino de subida hasta el cerro, bordeando su base.

A lo lejos, en dirección a Vilafamés, mientra subimos, vemos las antenas de la Penya del Corn.


Vamos subiendo de manera suave por el sendero.


En mitad del camino esta campanilla nos saludó con un leve tintineo que evitó que la pisáramos.


Llegamos a este cruce donde vemos paletas de la ruta oficial. Seguimos por la izquierda.


Ya en la cima del cerro, antes de entrar de lleno en el poblado, nos detenemos para tomar esta instantánea de Vilafamés.


Nos entretenemos a leer este panel que nos dará información sobre lo que vamos a encontrar.


Y lo primero que vemos es esta torre de carácter defensivo que formaría parte de la muralla que rodeaba el poblado. Pero nos extrañó que no tuviera ninguna puerta de acceso.


Algunos restos del poblado.
El Poblado de Els Estrets - Racó de la Rata es un yacimiento arqueológico ibérico ubicado en el término municipal de Vilafamés, en Castellón, España. Se trata de un poblado fortificado, declarado Bien de Interés Cultural en 1997, que data de los siglos III-I a.C.

Nos adentramos en el poblado y vamos viendo paredes de viviendas y calles.


Se han venido realizando actividades arqueológicas en el poblado desde 1990.
Por ello, presenta un buen estado de conservación.


(Foto de Emilio Romero)


Desde el cerro, hacia el norte, la impresionante cima del Penyagolosa.


Desde la cima del cerro se domina el Pla de Vilafamés.


En este histórico lugar decidimos hacernos en esta ocasión la foto de grupo.


Y a continuación buscamos el comedor de una antigua casa íbera para almorzar.


Almorzando en una estancia íbera. 
¿Cuántos individuos habrán almorzado aquí?

Tras el almuerzo damos otro vistazo a los restos.


Y dejamos el poblado para volver a Vilafamés. El primer tramo es por el mismo camino de subida.


Al llegar a la base del cerro dejamos a la derecha el camino por el que vinimos y seguimos de frente.
El camino de vuelta es similar al de ida, por caminos rurales entre campos diversos y casas de labor.


Emilio Romero inmortalizándose bajo una carrasca.


Los campos de almendros también fueron una constante durante el camino.


No sólo disfrutamos de flores, plantas y cultivos. También de coleópteros como esta hembra de aceitera común (Berberomeloe majalis), con ese abdomen tan alargado y tan llamativo por esas franjas transversales rojas.

Más viñedos, con Vilafamés al fondo.


Tenemos suerte que el sol aún no calienta todo lo que lo hará un poco más tarde y hace que llevemos el camino con cierta dignidad.


Preciosas amapolas que, como si de dos tortolitos se tratara, festean alegremente al sol.


Y más trigo, que nos recuerda la meseta.


Seguimos plácidamente con chismes diversos y conversaciones que abarcan lo divino y lo humano.
(foto de Emilio Romero)


El sol del verano y el calor favorecen la floración de los cardos de los que el camino estaba plagado, como éste de la foto.


Los cardos, a pesar de las espinas, presenta su flor ese intenso morado que los hace muy atractivos. Tanto es así que las mariposas "vanesa de los cardos" o cardera los cortejan continuamente.
(foto de Emilio Romero)


Foto típica del verano: las amapolas en medio de un trigal.

"Novia del campo, amapola
que estás abierta en el trigo;
amapolita, amapola,
¿te quieres casar conmigo?"

     Juan Ramón Jiménez


Mas viñedos.

"Dormimos, soñé la tierra
del sur, soñé el valle entero,
el pastal, la viña crespa,
y la gloria de los huertos."

           Gabriela Mistral


aproximadamente en el kilómetro seis y medio, salimos a la carretera CV-162, que ya no dejaremos hasta volver a Vilafamés. Aquí debemos caminar  con mucha precaución ya que no hay prácticamente arcén.


Apenas llevamos cuatrocientos metros encontramos este peirón. Desde aquí nos queda aproximadamente un kilómetro hasta Vilafamés.


Aunque este tramo es el más monótono de la ruta, siempre hay elementos que te distraen, como este burro que junto con otros dos, comía tranquilamente ajeno a nuestro paso.
El animalito nos ha traido a la memoria este fragmento del Quijote, porque nos recuerda a muchos de nuestros dirigentes: “Ya por muchas experiencias sabemos que no es menester ni mucha habilidad ni muchas letras para ser uno gobernador, pues hay por ahí ciento que apenas saben leer, y gobiernan como unos gerifaltes,”


Aún fotografiamos esta mariposa blanca de la col que se detuvo en el asfalto, tal vez estresada por el calor.

Acometemos el tramo final. A pesar de lo corto de la ruta, este último kilómetro se nos está haciendo un poco largo.
(foto de Emilio Romero)

Ya de nuevo, como esta mañana, la bonita estampa de Vilafamés y la cima del Morral.


A la entrada de la población encontramos este cartel que acredita a la población como una de las más bonitas de España. Ciento tres pueblos forman ya parte de esta asociación, "Los Pueblos más bonitos de España".


Coopetativa vinícola de Vilafamés. 
Aquí empezamos y aquí terminamos. Se ha cerrado el círculo.

Como dije al principio, como la ruta es corta, nos daría tiempo de hacer una visita a este bonito pueblo. En nuestro caso, ya lo habíamos visto, pero nos acercamos  para buscar un bar donde apagar la sed porque el calor ahora sí que apretaba.

De camino al bar, vemos la monumental iglesia de la Asunción y el castillo al fondo.


Al entrar en la población encontramos este otro peirón similar al que vimos en la carretera.


Y nos acercamos hasta el lavadero municipal.


Al final dimos con un bar donde aplacamos nuestra sed.
(foto de Emilio Romero)

Como hemos podido ver, aunque la ruta (paseo en esta ocasión) no sea nada excepcional, podemos disfrutar de ella con la cantidad de detalles y elementos que enriquecen cualquier camino. Lo importante es la actitud que adoptemos frente a lo que vamos a hacer. 

Pincha en el enlace para ver las fotos de la ruta.

Debemos disfrutar de la montaña siempre de la manera más segura posible para evitar riesgos y accidentes. Para ello es importante que leas estos consejos sobre "Seguridad en la práctica de senderismo y emergencias en montaña".

La ruta en el mapa



La ruta en Wikiloc.

Powered by Wikiloc

Película

No hay comentarios:

Publicar un comentario